Luego de varias idas y venidas, finalmente la intendenta de la localidad tinogasteña contará con un poco de oxígeno para dar sus siguientes pasos al frente del municipio. 
En una sesión extraordinaria esperada, la mayoría de los ediles fiambalenses le dieron el visto bueno a dos proyectos presentados por la jefa comunal, uno de los cuales era de vital importancia para poder sostener el funcionamiento del municipio a su cargo: la declaración de la emergencia económica. 
Por otro lado, también se aprobó la reformulación del organigrama municipal, el cual -cambios más, cambios menos- había permanecido prácticamente intacto durante los años de gestión del exintendente Amado “Coco” Quintar. 
La aprobación de los dos proyectos fue materia de una extensa discusión, ya que, en un primer momento, el debate se dilató como consecuencia de la falta de aprobación de estos. Posteriormente, en un llamado a sesión extraordinaria, entre el Ejecutivo municipal, la presidencia del Concejo Deliberante y la mayoría que ostenta el Frente para la Victoria en el órgano deliberativo pudieron arribar a un acuerdo para dar luz verde a las nuevas ordenanzas.

Emergencia económica

La intendenta Paulón había adelantado la presentación del proyecto de emergencia económica tras encontrarse con los supuestos faltantes de fondos del erario, lo cual también motivó una denuncia en contra del exintendente Quintar. 
Tras retrotraer un decreto de pase a planta permanente de empleados rubricado por el ahora diputado nacional, la jefa comunal explicó que la situación financiera del municipio es “crítica” y por esa razón se tomó la determinación de recurrir a un instrumento legal que le permita gestionar fondos frescos para poder hacer frente a las obligaciones pecuniarias de la municipalidad. 
El gasto principal -que ya debió ser sostenido con fondos provinciales- es el pago de haberes para los empleados municipales.

Organigrama y votación

El otro proyecto aprobado por el concejo fiambalense es la modificación del organigrama municipal. La iniciativa, según los fundamentos del proyecto, está basada en la necesidad de darle una nueva “impronta” al municipio con áreas que habían sido descuidadas y que deben contar con funcionarios que puedan realizar gestiones.
Una de esas áreas es Producción, que ahora se integrará en una de las secretarías regulares del municipio. 
Cabe destacar que la votación que dio pie a la aprobación del proyecto fue de cuatro ediles contra uno, respondiendo tres votos al Frente para la Victoria y uno al Frente Cívico y Social.
Actualmente, la presidencia y vicepresidencia del órgano está “repartida” con el cargo de mayor jerarquía para la fuerza dominante y el segundo espacio para la minoría radical.

“Soy de confianza para Paulón”

El concejal Eduardo “Tero” Bordón dialogó con El Esquiú.com sobre la votación de los proyectos y rechazó las acusaciones de “traición” que se dispararon en su contra por la “apertura a minorías” que propició en el Concejo Deliberante. 
“Yo soy el hombre de confianza de la intendenta Paulón; soy peronista y mi compromiso es con el peronismo y el pueblo de Fiambalá; por eso creo que debemos dejar atrás el tiempo en que uno por perder se lleva todo para complicar al que viene. Fiambalá necesita estabilidad democrática y las minorías deben tener participación en los actos de gobierno”, aseguró el edil. 
En ese sentido, Bordón aseguró que quienes “ahora salen a pegar” deben reflexionar sobre la “participación democrática”. “Sepan que tienen a una persona que responde al peronismo y al pueblo; uno está para escuchar y contener”, expresó.