El juez federal Sergio Torres procesó hoy a Victoria Xipolitakis y a dos pilotos de Austral en la causa por atentado a la seguridad de aeronaves que se inició tras la difusión del video de la vedette viajando en la cabina de la aeronave en el momento del despegue.

El magistrado consideró en el fallo que Xipolitakis puso “en peligro la seguridad del vuelo” con su presencia el 22 de junio en la cabina de mandos del avión comercial y trabó un embargo de 250 mil pesos sobre los bienes de los tres involucrados en el incidente.

La vedette, el piloto Patricio Zocchi y el copiloto Federico Matías Soaje fueron procesados por el delito de atentado contra la seguridad de aeronaves, que tiene una pena de 2 a 8 años de prisión.

El juez Torres aseguró en la sentencia que “lo acontecido durante el vuelo en trato a todas luces evidencia que deliberadamente se dejaron de lado las acciones propias de una profesión tan delicada, para con toda liviandad y alboroto, transformarlo en un irresponsable juego cuasi-mediático”.

“Este tema no me da felicidad”, dijo Xipolitakis al conocer el procesamiento en su contra.

La vedette se manifestó “tranquila” y aseguró que está a “disposición de la Justicia”.

“Yo no hice nada malo”, dijo en declaraciones al canal América, e insistió en responsabilizar a los pilotos por su presencia en la cabina del avión.

El hecho ocurrió el 22 de junio cuando Xipolitakis permaneció todo el vuelo, desde Aeroparque rumbo a Rosario, en la cabina junto a los pilotos y registró todo con su celular, lo que después se hizo público.

La causa se inició por una denuncia penal del presidente de Aerolíneas Argentinas, Mariano Recalde, quien además despidió a los dos pilotos.

El juez Torres destacó en su resolución que los pilotos violaron el Manual de Operaciones de la Empresa (MOE), que impide la presencia de otras personas en la cabina de mandos.

“He aquí el primer punto en clara infracción a las normas imperantes, insisto, a efectos de nada menos que garantizar un vuelo seguro”, sostuvo el magistrado.

La Justicia peritó el celular de Xipolitakis en cuyas imágenes se pudo ver que la vedette registró el vuelo “desde el instante mismo en que la aeronave se pusiera en marcha, comenzara el rodaje para su posterior despegue y, en última instancia, ocurriera su aterrizaje”.

Asimismo, constató que la vedette utilizó su celular para enviar mensajes por el sistema de chat “Whatsapp” en los momentos “inmediatos al despegue y aterrizaje” “Xipolitakis conversa permanentemente con Zocchi Molina y Soaje quienes, si bien en ocasiones le indican que se mantuviera en silencio, lo cierto es que, ante el caso omiso de Xipolitakis, promueven el diálogo incluso durante las etapas críticas y, particularmente, en ocasión de realizar el chequeo de seguridad previo al vuelo y de mantener comunicaciones con la torre de control de tráfico aéreo”, agregó el magistrado.

En las imágenes también se observa que en tramos del vuelo, la vedette accionó las palancas de mandos y que los pilotos le señalaban cómo hacerlo.

El juez Torres concluyó que la presencia de Xipolitakis en “la cabina de mando durante todas las etapas del vuelo AU 2708, necesariamente pone en peligro la seguridad del vuelvo”.

El magistrado entendió necesario recomendar “la restricción de las facultades del comandante en cuanto a determinar la admisión de pasajeros en la cabina de mando y, de la tripulación en general, para habilitar la ubicación de pasajeros VIP en asientos que no corresponden a la clase de su boleto de embarque”.