Florencio Randazzo tomó la decisión anoche. Tras la cumbre en Olivos, el ministro del Interior y Transporte se reunió con sus colaboradores en la Casa Rosada. A las 15.30, se retiró de Balcarce 50 para evaluar con su entorno más cercano el ofrecimiento que le había hecho Cristina Kirchner para que fuera candidato a gobernador bonaerense. Horas después, le mandó un mail a la Presidenta en el que rechazó la posibilidad de bajarse a la provincia de Buenos Aires.

Esta mañana, el periodista Daniel Tognetti leyó en Radio Del Plata algunos fragmentos de la carta que Randazzo le envió a la jefa del Estado. "Tal como me pediste, te acompañaré hasta el final de la gestión para seguir transformando porque mi compromiso con vos es inquebrantable", escribió el funcionario.

"Te respeto como militante, te admiro como Presidenta y te quiero como persona. Soy un hombre de palabra, creo fervorosamente en el valor de la misma y en los compromisos asumidos", remarcó.

En su misiva a la Presidenta, el funcionario ratificó su decisión de no competir por la sucesión de Daniel Scioli en las PASO de agosto próximo. "No borro con el codo lo que escribo con la mano. Por eso, no puedo aceptar ser candidato a gobernador", señaló.

Además, le garantizó que no renunciará a su cargo, tal como había trascendido en las últimas horas, y que recién se irá a su casa cuando cambien las autoridades a fin de año. "Y tal como lo dije públicamente, después del 10 de diciembre seguiré defendiendo el proyecto desde mi lugar de militante", apuntó el funcionario.

Los deseos de Randazzo de pelear por la presidencia quedaron heridos de muerte anteayer, cuando se enteró por televisión que Cristina Kirchner ya había elegido la fórmula del Frente para la victoria: Scioli- Carlos Zannini . Ayer, la primera mandataria se reunió con el ministro del Interior y Transporte en la quinta de Olivos y le pidió que se bajara a la provincia de Buenos Aires, una alternativa que el funcionario había dicho varias veces que no aceptaría. Aún disgustado por quedarse fuera de la disputa por el sillón de Rivadavia, Randazzo pidió tiempo para tomar una decisión. Se replegó en su casa de Gonnet y evaluó la situación.