“Sorry, hoy con la comida estamos igual que Venezuela”, dijo Cristina Fernández de Kirchner en un acto en Mendoza el fin de semana.

Esa frase desató el enojo de los venzolanos que llegaron a nuestro país huyendo de la situación que se vive en su país.

En diálogo con Radio Mitre Mendoza, Luis Eras, un venezolano que vive hace tres años en Mendoza contó lo que sintió.

“El sábado me llegó la información del discurso de la ex presidenta. A la comunidad venezolana nos causa profunda indignación oír tal afirmación con tal contundencia. Que venga de ella, quien es cómplice de la crisis humanitaria que estamos viviendo en nuestro país… porque ella ha sido amiga del dictador venezolano Nicolás Maduro, porque ella lo condecoró en el 2013 cuando era presidenta. Que ella afirme de esa manera tan a la ligera que la situación es igual a la venezolana nos causa indignación, lo sentimos como una burla de ella hacia nosotros porque no sabe de la magnitud de la gravedad del asunto”.

“Hoy en Venezuela el sueldo mínimo es de 5 dólares. Imagina que como argentino solamente puedas ganar 250 pesos al mes y que con eso solo puedas cubrir todas las necesidades de servicios, comida y medicina. Eso es incomparable en este país. Por otro lado, en Venezuela con mi terminal de documento tenía acceso un día a la semana para ir a un supermercado público o privado para ver si había algún elemento básico: arroz, fideos, aceite… si había era afortunado y podía adquirirlo. Sino no podía acceder a la comida más básica en mi país. Hoy quizá hay un poco más de abastecimiento en Venezuela porque las personas han tenido la posibilidad de traer de afuera pero dolarizado. Si un arroz sale 1 dólar, qué hacés si ganás 5 dólares al mes”.

“Llegamos a la grave crisis humanitaria que tiene aproximadamente 4 millones de refugiados en todo el continente y Europa también. Por eso nos indignan mucho las declaraciones de la ex presidenta, sabiendo ella y siendo cómplice de esa situación. Porque bastante apoyo le brindó al Gobierno junto a otros presidentes como Lula Da Silva, Dilma Rousseff, procesados por corrupción”.

Asimismo, indicó que las expresiones de Cristina Fernández responden a una campaña “sucia”: “Diría que es una campaña sucia electorera, quiere de alguna manera despejar ese fantasma para ella, de que si vuelve al poder la Argentina va a correr la misma suerte que Venezuela. Lo cierto es que ella seguía una ideología al gobierno venezolano donde de alguna manera se puede llegar a algo parecido si Argentina continuaba con esa forma de gobernar. Nosotros los resultados los tuvimos, la Argentina tuvo la posibilidad de dar un giro. Hoy se disputa ese modelo de volver al pasado o preservar el presente”.