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ECONOMIA
22 de marzo de 2017
Luego de una fallida reunión entre los productores y los directores de instituto Nacional de la Yerba el clima se enraleció aún más de lo que estaba.
A raíz de la reunión frustrada entre los productores de yerba mate y los directores del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), el clima se tornó mas caliente en Misiones.
La ausencia de varios de los responsables del INYM provocó que la reunión se frustre. La misma debía llevarse entre los productores yerbateros, que actualmente se encuentran en un “acampe” en Posadas y los directivos del Instituto. Cansados de no se escuchados, los productores indicaron que marcharán a Posadas con 50 tractores, para protagonizar una protesta similar a la de 2001.
Este lunes, los yerbateros que encabezan desde el jueves la toma de la sede del INYM, debían sentarse a discutir posibles salidas a la crisis que atraviesa el sector, pero los directivos del Instituto justificaron el faltazo alegando falta de garantías para realizar la sesión. Los ausentes responden al sector industrial y al Gobierno de Corrientes. Tampoco estuvo Alberto Ré, el presidente del Instituto.
Ayer, después de una extensa reunión, los productores accedieron a desalojar parte del edificio del INYM para el encuentro con los directores, pero Ré dio marcha atrás con la convocatoria y también pegó el portazo sin previo aviso.
Como respuesta al desplante, los yerbateros llamaron a otros productores a marchar hacia Posadas con medio centenar de tractores para presionar al INYM. Además, tienen un oído puesto en la Secretaría de Agricultura de la Nación, que debe resolver los valores que regirán para la zafra que comienza en abril y finaliza en septiembre. En ese sentido, el gobernador de Misiones Hugo Passalacqua, dijo que el precio de la hoja verde debería ser de 50 centavos de dólar.
Los ánimos se caldearon aún más cuando el director por Corrientes, Esteban Fridlmeier, sostuvo que el valor propuesto por Passalacqua “es una barbaridad” y sólo pudo haberlo propuesto “alguien que no está en el negocio de la yerba”.
Friedlmeier justificó su ausencia en la reunión de hoy. “Escuché a productores decir que teníamos que aprobar todo sí o sí tal cual querían ellos, y que además teníamos que renunciar porque si no, nos tiraban por la ventana”, sostuvo; pero admitió que el reclamo “es legítimo”.
Los yerbateros denuncian que los industriales están pagando tres pesos por kilo de hoja -el precio oficial es de 5,10- y con plazos de hasta once meses. El 2 de marzo pasado estuvieron en Plaza de Mayo, donde regalaron 30.000 paquetes de yerba para que los consumidores conozcan la crisis por la que atraviesa el sector.
En 2001, miles de empobrecidos yerbateros coparon la Plaza 9 de Julio de Posadas y con sus desvencijados tractores bloquearon los accesos a la Casa de Gobierno. La historia parece repetirse una vez más.