El ex número dos en el ministerio de Infraestructura y Planificación en la época de Julio De Vido no quiso declarar. El abogado defensor de López, Miguel Villagrán, solicitó al fiscal Araya un mes más de plazo para tomar conocimiento del expediente en el que está imputado su representado.

"López se negó a declarar a sugerencia de la defensa”, sostuvieron las fuentes.

El ex funcionario kirchnerista ingresó a las 11 a la sede de la Fiscalía jujeña y se retiró pasadas las 14, luego de haber sido trasladado desde Buenos Aires a San Salvador de Jujuy en medio de un fuerte operativo de seguridad. López partió a las 7.20 desde el predio de Campo de Mayo en un avión especial de la Gendarmería, luego de haber salido de la cárcel de Ezeiza donde se encuentra detenido, para declarar en la capital jujeña en la causa que involucra a Sala.

Durante las tres horas en que López estuvo en la Fiscalía jujeña, en los alrededores de la sede judicial aparecieron carteles con las leyendas “Cuidado con su bolso, López está cerca” y “López-Milagro Sala. #valijeros K. No se robaron valijas. Se robaron el techo de los jujeños”.

Otro que eligió el silencio

Otro funcionario del kirchnerismo, Germán Nivello, ex subsecretario de Desarrollo Urbano y Vivienda y actual subsecretario de Vivienda del gobierno de Alicia Kirchner en Santa Cruz, también compareció en la Fiscalía, y al igual que su ex jefe se negó a declarar.

López y Nivello están imputados por la justicia jujeña por los supuestos delitos de fraude a la administración pública y abuso de poder.

La causa fue iniciada por la presunta malversación de fondos públicos para construir viviendas sociales a través de las cooperativas de la organización social Tupac Amaruc, cuya jefa es Sala y está detenida desde enero.

En la misma causa también se encuentra imputado el ex gobernador de Jujuy Eduardo Fellner.

El fiscal Araya dijo semanas atrás a la prensa que “López habría certificado obras en 300 viviendas que se debían realizar en Calilegua y Humahuaca, pero faltan 90 millones de pesos”.

“López debía controlar el destino de los fondos y realizar las auditorías internas correspondientes para determinar si la cantidad de dinero que él depositaba en la cuenta de la Unidad Ejecutora Provincial tenía que tener certificados de obra en 100 por ciento”, agregó.

“Nosotros estamos constatando que esos certificados de obras no tenían fechas ni de inicio ni de finalización, lo que nos lleva a concluir que no había control”, explicó.