Esa falsa información fue recopilada por la Procuración General de la Nación, organismo presidido por la Dra. Alejandra Gils Carbó, quien sin chequear el origen y la fuente de la información, del mismo modo que no lo hicieron los miembros de la Justicia Federal,  la hizo pública. Con el proceder  de la Policía de Santa Fe, la Justicia Federal, el señor  Juez Federal el Dr. Sergio Gabriel Torres y su actuario el señor  Dr. Martín Yadarola y la Procuración del Tesoro, se afectó gravemente a una gran parte de la opinión pública que a través de las redes sociales mostro su incredulidad primero y su burla, después.

A simple vista podríamos estar en presencia de la presunta comisión del delito de incumplimiento de los deberes de funcionario públicos contra los más altos intereses del Gobierno Nacional. Las conductas de los funcionarios en cuestión deben ser exhaustivamente investigadas con el fin de deslindar responsabilidades y en su caso aplicarle el mayor rigor sancionatorio que previsto en el ordenamiento legal.

Lo cierto es que el único detenido hasta el momento se llama Martin Lanatta, en tanto que los dos restantes condenados y pro fugados continúan eludiendo la acción de la justicia y el sistema carcelario al que se encontraban sometidos. La detención fue fortuita por cuanto los prófugos tuvieron un accidente y el único herido, ahora detenido, o bien fue abandonado por sus cómplices o debido a las lesiones recibidas, o por su situación personal decidió entregarse a la policía.