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22 de Noviembre de 2024
23 de noviembre de 2015
El primer ballotage presidencial de la historia argentina otorgó al presidente electo la legitimidad de nada más y nada menos que 13 millones de votos, algo inédito en el país superando ampliamente a los 11,8 millones de votos que en 2011 obtuvo Cristina Kirchner.
Para alcanzar esa cantidad, Macri se benefició de varias circunstancias: en primer lugar, la de este año fue una primera elección presidencial en la que, además del normal crecimiento poblacional, el padrón electoral también aumentó por la inclusión, en 2012, por intermedio de la ley 26.774, de los jóvenes mayores de 16 años, que sumó más de 900.000 potenciales electores.
También, Macri se benefició de la normal polarización de un ballotage presidencial, en el que las opciones se reducen a dos. En cierto sentido, es lo que quiso evitar Carlos Menem cuando renunció al ballotage en 2003, convirtiendo en presidente a Néstor Kirchner con la menor cantidad de votos desde el regreso de la democracia.
Con una participación del electorado cercana al 80%, la elección tuvo una concurrencia apenas por debajo de la general (81,07%) y bastante mejor que la primaria, cuando rondó el 75%. También, la cantidad de "voto negativo" -blanco e impugnado- fue sensiblemente menor al 6% de las PASO y algo más baja que el 3,32% de la primera vuelta: con 2,46%, fue uno de los más bajos desde el regreso de la democracia.
Mauricio Macri tuvo un crecimiento sostenido en los tres turnos que tuvo la elección: de las PASO a la general, retuvo los votos de sus socios de Cambiemos y sumó gran parte de los nuevos votantes y el voto que en la primaría había sido en blanco. Ahora, en el ballotage, sumó poco más de 4 millones de votos, mientras que Daniel Scioli apenas logró aumentar 2,5 millones.
Ballotage 2015
En la provincia de Buenos Aires, donde Scioli buscaba hacer la diferencia, sólo consiguió 1,1 millones más que en la primera vuelta, mientras que Macri sumó 1,4 millones, con lo que la contienda quedó definida para el motonauta por 51% a 49%, insuficiente para alcanzar la presidencia.
Córdoba continuó con su hostilidad hacia el kirchnerismo: Macri se impuso allí con el 71,5%, aumentando su caudal en casi 400 mil votos, mientras que Scioli sólo pudo crecer unos 195 mil, retrocediendo en su porcentaje.
En Jujuy, la única provincia que Sergio Massa ganó en octubre, Macri se quedó prácticamente con todo: pasó de 70 mil votos, a más de 200 mil, superando a Daniel Scioli por cerca de 20 mi votos.