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SOCIEDAD
25 de septiembre de 2015
La edad no tiene por qué ser un impedimento para hacer deporte. Si no, que le pregunten a Hidekichi Miyazaki, quien batió el récord mundial de los 100 metros para mayores de 105 años.
Miyazaki, nacido el 22 de septiembre de 1910, recorrió la distancia en 42,22 segundos en Kioto, donde comenzó lento pero luego alcanzó un buen ritmo. Curiosamente, a pesar de entrar en el libro Guiness, no se mostró conforme. "No estoy satisfecho con ese tiempo", declaró justo después de haber recobrado el aliento. "Iba tan lento durante la carrera que los ojos se me llenaron de lágrimas", detalló.
Al nuevo récordman mundial lo apotan "Golden Bolt", en referencia a Usain Bolt, el atleta jamaiquino que ostenta el récord mundial en la especialidad. Por eso, antes de recibir el certificado oficial de Guiness para esa categoría recién estrenada, Miyazaki imitó la famosa postura del relámpago del ganador de seis oros olímpicos y hasta bromeó con el corredor centroamericano aún debe enfrentarlo en la pista. Lo hizo en presencia de sus bisnietos, quienes lo habían ido a ver y esperaron con flores.
Pese a obtener el récord, Miyazaki cree que su techo aún está lejos. "Sigo siendo un debutante, sabe. Voy a tener que entrenarme aún más duro. El entrenamiento fue de maravilla y me fijé un objetivo de 35 segundos. Puedo ir más rápido", declaró. De todas maneras, admitió: "Estoy orgulloso de mi salud. Los médicos me examinaron hace unos días y estoy como una rosa. Quizá ya no tenga la mente muy despierta, pero físicamente estoy fenomenal". Por eso, cree que podrá correr "dos o tres años más".
Miyazaki es el dueño del récord mundial de los centenarios en los 100 metros, con un tiempo de 29,93 segundos y comenzó con el atletismo a los 90 años. De 1,53 metros y 42 kilos, se echa cada día una mochila de un kilo a la espalda para entrenarse en el parque de su barrio, en Kioto. "Es un tema de voluntad", asegura para explicar su necesidad de correr rápido. "Hay que seguir y seguir".
Su espíritu de superación también lo lleva a desear compartir la pista con el propio Bolt. "Me gustaría correr contra él", dijo, sonriendo. "Hace dos o tres años, Bolt vino a Japón y dijo que quería conocerme. Alguien intentó contactar conmigo, pero me había ido y se fue sin verme. Lo lamenté profundamente", explicó Miyazaki.