Sabado
23 de Noviembre de 2024
JUDICIALES
11 de junio de 2015
La defensora de una maestra denunciada de abusar a más de 50 nenes de entre 3 y 5 años en un jardín de infantes de "La Feliz", dijo que los menores "pueden mentir, malinterpretar y distorsionar". Además cuestionó los testimonios tomados en Cámara Gesell.
El caso salió a la luz en 2013, cuando un grupo de padres denunció a Analía Schwartz, una maestra de música del instituto Gianelli de Mar del Plata, por haber abusado sexualmente de nenes de entre tres y cinco años. Hubo en total, más de 50 padres que denunciaron.
Sin embargo, en la investigación que todavía se está desarrollando, sólo se pudieron comprobar 9 casos de abuso y 6 de corrupción de menores. Son esos casos por los que se la procesó y por los que puede llegar a ser juzgada.
El caso generó gran conmoción en la comunidad de Mar del Plata y la semana pasada volvió a la escena mediática luego de que la abogada defensora de Schwartz, Patricia Perelló, realizara una serie de polémicas declaraciones sembrando desconfianza en las cámaras Gesell y poníéndose del lado de los abusadores.
Entre otras cosas, Perelló puso en duda "la gran cantidad de denuncias sobre abusos que hay en los últimos años", como si fuera parte de un invento de los padres y de los hijos que lo fabulan."La reconstrucción de una verdad histórica, es una difícil labor, pero el recurso a las pericias psicológicas como únicas reproductoras de realidad carece de todo fundamento (...)las pericias psicológicas nunca son una prueba irrefutable".
"Los niños pueden mentir, ya que imitan nuestras acciones"
"Los niños pueden mentir, ya que imitan nuestras acciones, y de hecho, nos escuchan a los adultos hacerlo en forma cotidiana, de todas maneras no creo que en los casos en que he intervenido los niños mientan, falseando la verdad ex profeso.
Pero no solamente pueden mentir, pueden malinterpretar, pueden distorsionar, y pueden tener un discurso co-construido a partir de interrogatorios inapropiados de sus padres, familiares, y de los propios psicólogos". Así mismo, explica que cuanto más chico es el menor, es más fácil que estas "distorsiones" sucedan.
Marian Gay, miembro de EnRed (Red Solidaria de Violencia Abuso y Trata)
Expresó que "estamos acostumbradas a recibir este tipo de declaraciones por parte de la abogada Perelló. Está invalidando la validez del relato sobre el discurso de los chicos. Está vulnerando sus derechos como niños", explicó la especialista.
En ese sentido, expresó que "se trata de una cuestión ideológica. Esta mujer siempre defendió y defiende abusadores, es su forma de defenderse. Sin embargo, la prueba más específica, el signo por excelencia de quienes trabajamos con chicos abusados, es justamente su relato. No validarlo, es no validar la palabra de los niños, es totalmente ridículo", señaló.
"Está invalidando la validez del relato sobre el discurso de los chicos. Está vulnerando sus derechos como niños"
"Es imposible que los menores puedan sostener un relato que no hayan vivido, experimentado, no tiene coherencia lo que está diciendo", agregó.
Cristian Prada abogado de once familias denunciantes
expresó que "es ilegal que haya hecho públicas las declaraciones de los chicos, incluso, lo que dice no es ni un tercio de lo que realmente dijeron. Y yo no me puedo exponer a publicar las partes más terribles porque me pueden sacar la matrícula".
"Es una crítica muy importante al trabajo que realizan los psicológos, uno puede estar de acuerdo o no, pero no se puede deslegitimar de esa forma. De todas formas es una maniobra de esta mujer para defender a su clienta. Desprestigiar el trabajo de la justicia, los psicólogos incluídos, presionar y acusar a los padres y deslegitimar la declaración de los chicos. Es el ABC de esta mujer", explicó el letrado.
Luego de casi dos años de investigación, la causa está a punto de ser elevada a juicio oral. "En la investigación acreditamos nueve abusos sexuales y seis casos de corrupción. Siempre que haya una duda se suele ir a juicio, acá hay muchísimas pruebas, tenemos fe de que va a llegar". señaló Prada.
"Desprestigiar el trabajo de la justicia, los psicólogos incluídos, presionar y acusar a los padres y deslegitimar la declaración de los chicos. Es el ABC de esta mujer".
"Los padres tienen miedo de hablar porque ella los acusa, los amenaza diciéndoles que tengan cuidado con lo que dicen porque puede demostrar que los abusos fueron hechos por ellos, o que son cómplices, y eso asusta a cualquier padre", explicó el letrado.