En su primer acto oficial frente a las autoridades delas Fuerzas Armadas realizado este viernes  y en donde autorizó la partida del buque rompehielos Almirante Irizar en el marco de la segunda etapa de la Campaña Antártica, el jefe de Estado, Alberto Fernández, puntualizó que “tenemos una tierra a la que nunca vamos a renunciar y reclamar como propia”. Además, el mandatario recordó a los soldados caídos durante el conflicto bélico de 1982 y los calificó como “héroes a los que guardamos gratitud eterna”.

El presidente estuvo acompañado por el ministro de Defensa, Agustín Rossi; los jefes del Estado Mayor Conjunto, general Bari del Valle Sosa; y de la Armada, almirante José Luis Villán, miembros de entidades científicas e invitados especiales.

Alberto Fernández reafirmó el carácter de “política de Estado” que tiene el reclamo argentino del ejercicio de la soberanía sobre las islas Malvinas y aseguró que “no hay más lugar para colonialismos en el siglo XXI”, apuntó a “la paz y la diplomacia” como “único camino posible”, y adelantó la convocatoria a “todas la fuerzas políticas” y “representantes del mundo académico y de los excombatientes” para “diseñar y llevar adelante las estrategias que permitan conducir con éxito el reclamo”.

Por otra parte, se informó que el rompehielos navegará 5.400 millas náuticas, aproximadamente unos 10.000 kilómetros y además llevaran a cabo las tareas de descarga del material replegado de las 13 bases entre permanentes y transitorias y el apoyo logístico a las actividades científicas que desarrolla el país en el continente blanco.

Cancillería

El Gobierno argentino ratificó este viernes su reclamo de soberanía sobre las islas Malvinas al cumplirse 187 años de la usurpación de las fuerzas británicas a ese archipiélago del Atlántico sur.

“Argentina reafirma una vez más los imprescriptibles derechos de soberanía que posee sobre las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes y que son parte integrante de su territorio nacional”, informó la Cancillería argentina en un comunicado.

Sostuvo que el 3 de enero de 1833 las islas Malvinas “fueron ilegalmente ocupadas por fuerzas británicas que desalojaron a la población y a las autoridades argentinas allí establecidas legítimamente”. Recordó que entonces Argentina protestó inmediatamente ese “acto de fuerza ilegítimo y nunca lo consintió”, manteniendo hasta hoy el “firme reclamo de ejercer su soberanía efectiva» sobre los archipiélagos y los espacios marítimos del Atlántico Sur ocupados por el Reino Unido.

“Asimismo, Argentina ha rechazado ininterrumpidamente las actividades unilaterales de exploración y explotación de recursos naturales renovables y no renovables en espacios marítimos argentinos ilegalmente ocupados que, sumadas a la continuada presencia militar británica en el Atlántico Sur, violan resoluciones de Naciones Unidas y han suscitado expresiones de preocupación y rechazo de la comunidad internacional”, afirma el comunicado.

Para la Cancillería argentina, la recuperación del ejercicio efectivo de la soberanía sobre las Malvinas, “respetando el modo de vida de sus habitantes”, constituye un “objetivo permanente e irrenunciable del pueblo argentino”.

Argentina y el Reino Unido se enfrentaron en 1982 en una guerra que duró 74 días y en la que murieron 649 argentinos y 272 británicos.