Un hombre de 31 años fue detenido ayer bajo la sospecha de ser el autor de un robo y un abuso sexual cometido el domingo 31 de mayo en el barrio Pacífico. Después del mediodía se produjo un enfrentamiento entre la policía y un grupo de personas frente a la vivienda del sospechoso.
El detenido es una persona con antecedentes por delitos similares que ya estuvo condenado en esta ciudad varios años y que hace poco tuvo otra pena de tres meses de prisión en suspenso. Además, podría ser el responsable de otro delito contra la integridad sexual ocurrido en enero de este año.
Personal policial encabezado por el jefe de la Comisaría Primera, comisario Alfredo Rebichini, realizó al menos dos procedimientos en la mañana de ayer. Uno cerca de las 8 de la mañana en una obra en construcción, allí trabajaba como obrero de albañilería el sospechoso. Otro allanamiento en busca de pruebas se realizó cerca de las 10.30 en un domicilio de calle 104 entre 33 y 35, allí reside la madre del sujeto y hace poco tiempo él estaba viviendo en ese mismo domicilio.
Rebichini refirió que están trabajando dentro de la investigación con la fiscal Ana Laura Ruffini. Y confirmó que detuvieron a un hombre que fue puesto a disposición de la Justicia.
El comisario refirió que la detención se realizó con las pruebas que se lograron reunir en torno al caso, y reconoció que había similitudes con otro hecho ocurrido en enero por el cual no llegó a concretarse la detención de su autor.
Se trata de una persona que vive en esta ciudad y que no se resistió a ser detenido. Además, la madre del sospechoso colaboró con el procedimiento que se realizó en el domicilio familiar.

Identificado.
La captura del sospechoso se logró por diferentes datos obtenidos luego de que la víctima, una mujer de 35 años, realizara la denuncia policial el pasado domingo. Fue la perjudicada quien logró aportar información para identificar al posible agresor. Pese a la difícil situación atravesada por la denunciante, quien fue atendida en el hospital local y también recibió asistencia de la Oficina de Atención a la Víctima, su colaboración y valentía fueron fundamentales para el avance del caso.
La mujer fue sorprendida por un desconocido el pasado domingo antes de las 6 de la mañana. El hombre ingresó en su vivienda, se metió dentro de la habitación y pese a su resistencia logró someterla, luego de consumar el abuso el sujeto sustrajo un teléfono celular de su víctima y se llevó una cifra de dinero cercana a los mil pesos.
Por otra parte, un hecho de similares características, con el ingreso forzado a un domicilio de la misma zona de la ciudad y el ataque de tipo sexual a su inquilina, se reportó en enero de este año con intervención del fiscal Damián Campos. Ahora según determine la investigación en curso ambos casos podrían quedar vinculados en el mismo proceso judicial.

Violento enfrentamiento.
Después del mediodía un grupo de personas comenzó a reunirse cerca del domicilio de la familia del sospechoso. Al parecer la intención de algunos de los presentes era pedir justicia e intentaron causar daños en la vivienda, sin embargo algunos sujetos en conflicto con la ley también se acercaron hasta el lugar en busca de llegar a un enfrentamiento.
La policía intentó mantener el orden pero a medida que la gente se puso más agresiva, tirando piedras, botellas y otros elementos, se debió desplegar un operativo de seguridad reforzado por varias de las sedes policiales de la ciudad. Desde la Unidad Regional II (URII) indicaron que los efectivos recurrieron a escudos y utilizaron armas con balas de salva a modo de advertencia. La situación fue tensa, incluso algunos de los agentes resultaron heridos. 
Además, fue demorado un hombre que esgrimió un cuchillo. Se trata de una persona con frondosos antecedentes que no tiene ninguna relación con la investigación actual pero llegó al lugar y quiso herir a los efectivos. La presencia policial, según indicaron desde la URII, se mantendrá con guardia permanente.