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22 de Noviembre de 2024
INSOLITO
4 de octubre de 2019
El hecho sucedió en la madrugada del pasado viernes 27 de septiembre, pero recién trascendió ayer, cuando una de las mujeres arrestadas por negarse al test de alcoholemia al ir caminando denunció el procedimiento en la Judicial Nº 8.
Un curioso hecho que involucra a un personal de la Dirección de Seguridad Vial se conoció ayer tras la denuncia de una mujer, propietaria de un automóvil, el que fue secuestrado y remitido al Corralón Municipal por distintas infracciones. En tanto que a ella y a una amiga que la acompañaba al momento del supuesto operativo en la vía pública, las arrestaron y llevaron a la comisaría por entorpecer el procedimiento, al negarse a firmar el acta de infracción donde el funcionario policial dejaba constancia de que se había negado a realizarse el test de alcoholemia, encontrándose ella desplazándose a pie cuando supuestamente pretendían realizárselo.
Segun trascendio el extraño episodio sucedió el pasado 27 de septiembre a las 2.30 de la madrugada, aun cuando recién trascendió ayer tras la denuncia de una de las damnificadas, Érica Centurión, de 29 años.
La mencionada se hizo presente en la Unidad Judicial Nº 8 y manifestó que aquella madrugada, mientras caminaba a pie en compañía de una amiga, Paola Olmos (32), sobre Avenida Arnaldo Castillo (en la zona del Alto Fariñando) a la altura del local bailable Joy, se acercó a dos policías mujeres que estaban sobre la vereda paralela a la avenida, para preguntarles si su vehículo (un automóvil marca Chevrolet, modelo Corsa, de color gris, dominio EIO-971) se encontraba bien estacionado, según se desprende de su relato en la denuncia.
Asimismo, aclaró Centurión a los sumariantes que le tomaron la denuncia. Dicho automóvil era de su amiga Paola y se encontraba estacionado sobre la Avenida en inmediaciones al boliche antes referido.
Fue entonces, siempre según la denunciante, que se acercó a ellas su acusado, Walter Fabián Vargas, empleado de la Dirección de Seguridad Vial, quien dijo estar a cargo de un supuesto operativo e, irrumpiendo la conversación que mantenía con las colegas de este, le preguntó a Paola si ella era hermana de un oficial de apellido Olmos.
Cuando la amiga le dijo que sí -señaló Centurión en la denuncia-, Vargas hizo un gesto de mala gana e inmediatamente le pidió la documentación del rodado.
La amiga -indicó la denunciante- tenía todo excepto el seguro, porque le dijo que iría a buscarlo al auto, pero el acusado ordenó a las mujeres policías con las que estaban conversando que le secuestraran el automóvil, labrándoles de inmediato un acta.
Arresto
En el escrito, estas personas hicieron constar, según la denunciante, que su amiga Paola se había resistido a presentar la documentación requerida y que también se había negado a realizar el test de alcoholemia, lo que le pareció algo insólito ya que ambas, al momento de ser abordadas por el policía supuesto encargado del operativo de control, se desplazaban a pie.
Continuando con la denuncia, Centurión indicó que la policía le pidió a su amiga que firmara el acta de infracción, a lo que obviamente se negó, teniendo en cuenta lo que allí decía, ya que todo era falso según su entender.
Esta negativa las llevó a terminar arrestadas en la Comisaria Séptima, a donde fueron trasladadas supuestamente por entorpecer el procedimiento policial.