El juez federal Luis Rodríguez resolvió mandarle el expediente de la causa por Yacimientos Carboníferos Río Turbio al magistrado Claudio Bonadio, después de que decidiera abandonar la causa.

En su momento, el nuevo juez designado tuvo en su poder la investigación sobre la central térmica de Río Turbio, un ambicioso proyecto kirchnerista que no puede funcionar porque no produce el carbón necesario. Ante esta realidad, Rodríguez interpretó que debía otorgarle la causa a Bonadio.

 
Además, también influyó en la decisión que el juez de los cuadernos de las coimas haya trabajado en la investigación por el lavado de dinero de Daniel Muñoz  y el enriquecimiento ilícito de De Vido y su familia, ambas anexadas ahora al megacaso de los cuadernos de la corrupción.

Precisamente, en el caso de la usina de Río Turbio, están investigados De Vido, su mano derecha Roberto Baratta, el ex gobernador de Santa Cruz Daniel Peralta y un grupo de empresarios de la firma Isolux-Corsan, encabezados por Juan Carlos De Goycoechea, el hombre de negocios que abrió el dominó de "arrepentidos" en la causa de las anotaciones del chofer Oscar Centeno.

 
Por otro lado, esta decisión dejaría contento al Gobierno, desde donde hace unos años atrás pidieron el apartamiento del juez Rodríguez, después de que aceptara un pedido de recusación contra el fiscal Stornelli planteado por la defensa de Baratta. Sin embargo, la Cámara Federal repuso a Stornelli en el caso, pero no aceptó apartar a Rodríguez. Si el caso pasa a manos de Bonadio, el fiscal ya no sería más Stornelli.

La noticia tomó por sorpresa a los abogados y algunos de ellos se muestran temerosos de que con este cambio la situación de varios implicados con falta de mérito o procesados en libertad pueda empeorar, según fuentes consultadas por Infobae.

En el marco de esta causa, De Vido cumplirá dos años preso en octubre próximo. Si bien Turbio tiene prisión preventiva, pero después de quedar preso se le activaron otras causas por las que también dispusieron su detención, como en el caso de los cuadernos. Además, en octubre pasado, fue condenado a cinco años y ocho meses de prisión por corrupción en el marco de la tragedia de Once.