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MUNDO
15 de noviembre de 2018
Los bomberos ya no tienen forma de contener el avance de las llamas
Al menos 56 personas murieron en los incendios que están devastando California. Según la prensa local más de 50 personas fallecieron en el incendio bautizado Camp fire, en el norte del estado, y otras en el llamado Woolsey Fire, más al sur, en el condado de Los Angeles. Son hasta el momento 130 los desaparecidos.
Las llamas siguen devorando absolutamente todo a su paso, destruyendo bosques, casas y alimentando nuevos temores como el de contaminaciones químicas o nucleares. Los desplazados suman más de 50.000. Las viviendas destruidas son unas 6.400, que se agregan a otras 435 al sur, entre ellas numerosas villas de estrellas de Hollywood y de la música, en especial en Malibú, cuyos habitantes recibieron órdenes de evacuar. Las llamas, alimentados por vientos que se abaten sobre una vegetación seca a causa de una prolongada sequía, quemaron 505 mil km cuadrados al norte y otros 378 al sur.
Los bomberos lograron contener solo el 30% del frente de fuego, haciendo más lento su avance hacia Oroville, una localidad de 19 mil habitantes, después que se tragó a Paradise, al norte de Sacramento, capital de California.
El presidente Donald Trump se apresuró a declarar una zona de desastre en el estado "para aliviar algunas de los increíbles sufrimiento en curso", pero la medida no sirvió para aplacar las polémicas en torno a sus acusaciones contra la gestión del patrimonio forestal local.
En tanto, la organización "de los físicos por la responsabilidad social" alertó que el humo y las cenizas de los incendios de California pueden difundir la contaminación radioactiva y química presente en el suelo y en la vegetación cercana a un antiguo sitio nuclear en las colinas del noroeste de Los Angeles.
Se trata del Santa Susana Field Laboratory, un sitio usado por décadas para probar los motores de los misiles y realizar investigaciones nucleares. Uno de sus reactores sufrió una parcial fusión en 1959. Pero las autoridades aseguraron que no hallaron niveles de radiación por encima de la norma después que las llamas llegaron al lugar.