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MUJER
11 de junio de 2018
El perfume se usa para una cita, para ir al trabajo o para sentirnos bien con nosotros mismos... Pero en ocasiones lo echamos mal por no contar con la información adecuada.
Nos encanta perfumarnos, bien sea antes de una cita, cuando vamos al trabajo, para incentivar una noche de placer o para sentirnos bien con nosotros mismos. Si te gusta echarte perfume en cualquier situación y tienes varios frascos que usas según la ocasión, te interesará saber como sacarle todo el partido.
Aunque te consideres un experto en el ‘eau de toilette’ o en las fragancias que están de moda, tal vez no te estés aplicando bien del todo el perfume. ¿Cómo se hace? Te lo explicamos.
El perfume forma parte de nuestra personalidad
Seguro te ha pasado de relacionar una fragancia con una persona de tu pasado o presente; o que cuando hueles a alguien que lleva tu mismo perfume sentir una especie de ‘hermandad’ difícil de explicar.
Esto se debe a que la colonia o los perfumes son productos que no solo sirven para ‘oler bien’ sino también para marcar nuestra personalidad. Los hay más frutales o más cítricos, más suaves o más fuertes, más acordes a actividades diurnas o pensados para la noche…
Cada temporada en las tiendas aparecen nuevas presentaciones de perfumes, y por supuesto están aquellos clásicos que todos conocen y reconocen a una legua de distancia. Es que estos aromas forman parte de nuestro día a día y hay quienes aseguran que si no usan colonia antes de salir de casa, sienten como si no llevasen ropa.
Errores al usar perfume
Existen muchos mitos e ideas erróneas en cuanto a estas sustancias que se usan desde hace miles de años. La desinformación y la costumbre pueden ser perjudiciales para estas delicias aromáticas.
Por ejemplo, una de las equivocaciones más comunes es guardar los frascos de perfume en el baño, ya sea a la vista o en un mueble. El calor y la humedad del ambiente pueden provocar efectos colaterales en el producto y empeorar el aroma. Aunque sea cómodo tener a mano el frasco y echarlo tras salir de la ducha, no es una buena idea.
Perfume.
¿A que seguro te pones perfume en las muñecas y las frotas entre sí? ¡Otro error! Con este hábito lo único que logras es que los aceites y componentes de la fragancia se rompan y duren menos sobre la piel.
O quizás eres de los que se perfuman con un efecto ‘lluvia’ y se quedan debajo esperando que la fragancia descienda a sus cuerpos. Sin embargo, la mayor parte del producto se mantiene en el aire. ¡Y con lo que cuestan los perfumes no podemos usarles para aromatizar el ambiente!
Otro mito en relación a las fragancias es que si el olor perdura es porque se trata de un producto de buena calidad. Sin embargo esto no es cierto. Las horas y horas de duración que te aseguran los vendedores no es más que la utilización de aceites demasiado potentes.
Y otra cuestión que no podemos dejar de lado: la cantidad no es sinónimo de calidad. Eso se aplica a los litros y litros de perfume que gastamos al echarnos demasiado. No es necesario apestar a todo el mundo, con que se sienta a corta distancia es suficiente.
¿Cómo echarse el perfume?
Los anuncios que aparecen en la televisión nos hacen creer que usar cierta fragancia nos convierte en personas más sensuales, más femeninas o masculinas, más fuertes o más delicadas… ¡Pero no nos explican cómo echarnos el perfume!
Sigue los consejos que te daremos a continuación, para perfumarte como corresponde y que la fragancia dure más tiempo, sin importar su calidad. Además, el frasco tardará más en terminarse y no serás tildado como una persona que se baña en perfume:
1. Aplica donde late el pulso
Esto quiere decir en aquellas áreas donde la temperatura corporal es más elevada y por ende, la fragancia tardará más en evaporarse. Las zonas donde colocar el perfume son: tras las orejas, en las muñecas, detrás de las rodillas y en la clavícula.
2. Usa después de la ducha
Ya sabes que no debes colocar los frascos de perfume en el baño, por lo tanto, después de bañarte tendrás que dirigirte a tu habitación y allí usar la fragancia. De esta manera, evitarás que el aroma se ‘mezcle’ con los típicos olores personales. Con la piel limpia y seca, la colonia se notará más y durará más tiempo.
Cómo elegir el perfume.
3. Elige el adecuado
Uno de los típicos errores al usar perfume es creer que porque se trata de una marca conocida o es importado lo podemos llevar. ¿Cómo determinar si una fragancia es para ti? Por tus gustos particulares, en primer lugar. Déjate llevar por lo que dicte tu olfato.
En segundo término, según el uso que le darás, ya que no es lo mismo echarte una colonia para ir todos los días a la oficina que elegir un perfume para una ocasión especial (una cena, una cita, una salida, una fiesta, etc).
4. Mantén alejado de la piel
No hace falta apoyar el frasco contra el cuerpo para colocarlo. Lo mejor es que la botella se encuentre a unos 15 centímetros de distancia. Una manera de verificar si está muy cerca es ver cómo queda la piel. Si tras el rociado la zona queda mojada, deberás alejar el perfume la próxima vez.
5. Deja que se seque
No te frotes las muñecas y no te pongas ropa que tome contacto con el perfume. Es fundamental que dejes pasar unos 10 minutos para que el área esté bien seca y la fragancia se haya impregnado bien.