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JUDICIALES
3 de noviembre de 2016
El juez en lo penal económico Marcelo Aguinsky ordenó este miércoles la detención de un ciudadano coreano argentino identificado como “Kung Fu” o “Mister Korea” que, de acuerdo a la pesquisa, era el encargado de conseguir clientes para el polémico negocio que encabezaban el empresario paraguayo Oldemar Barreiro Laborada y Claudio Minnicelli, cuñado de el ex ministro Julio De Vido.
Se trataría de un financista de origen asiático y 1,80 metros de altura cuyo retrato hablado fue difundido por el Juzgado para facilitar su captura dado que aparecía en todas escuchas telefónicas que permitieron identificar a los 12 imputados.
"Su rol era el conseguir los clientes, que eran los dueños de los containers judicializados porque contenían mercaderías de contrabando, y cobrar los servicios de la banda, que eran liberarlos”, dijeron fuentes judiciales.
En tanto, el juez ordenó la libertad del “arrepentido” Federico Tiscornia, que se convirtió en el primer beneficiado de la ley sancionada la semana pasada por el Congreso y promulgada en la fecha, que promete beneficios a quienes colaboren con las investigaciones judiciales.
Tiscornia, medio hermano del ex juez Guillermo Tiscornia, fue el primero de los tres excarcelados la semana pasada en pagar una fuerte fianza de 500 mil pesos para conseguir la libertad pero los beneficios judiciales son “a futuro” y al momento de fijarse las penas, explicó la misma fuente.
Por otra parte, este miércoles se presentó detenido y mañana será indagado una de las piezas claves del entramado, Alberto Giacumbo, que se desempeñaba como el segundo jefe de la División Control y Fiscalización Operativa número 2.
El martes hizo lo propio el ex jefe de la Terminal Portuaria número 5 de Buenos Aires, Mauro Delmastro, quien facilitaba el movimiento de los containers observados por contener mercaderías de contrabando.
Los dueños de estos containers pagaban hasta 70 mil dolares por ese servicio, de acuerdo a las constancias judiciales.
Ahora sólo permanecen prófugos, además de “Kung Fu”, Claudio Minnicelli y el agente aduanero Néstor Frega.
Según la acusación que derivó en las detenciones, todos ellos conformaron una asociación ilícita para contrabandear mercaderías y destrabar containers bloqueados por los controles aduaneros.
Además de ingresar mercadería de contrabando, la banda realizaba tareas de “liberación o de desbloqueo de contenedores o mercaderías cuyo ingreso a territorio nacional, según se sospecha, habría intentado concretarse entorpeciendo o aun evadiendo íntegramente el control aduanero”, según la resolución donde se ordenó detener a los acusados.