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CLIMA
9 de enero de 2016
Hasta ahora, el departamento con mayores problemas fue Valle Viejo. Creció el Santa Cruz y aisló a la población. Y se anegaron varias calles.
Como consecuencia de la copiosa lluvia caída en los últimos días, el río Santa Cruz que proviene de Paclín y pasa por Valle Viejo, incrementó su caudal de agua dejando aislados a los vecinos de la localidad de Huaycama.
El badén provisorio que se había ejecutado para posibilitar el paso vehicular fue arrastrado por la creciente.
Este hecho que se viene repitiendo desde hace varios años sin que se encuentre una solución definitiva para los pobladores de este distrito, volvió a alterarlos y exigen una urgente solución.
"A esto lo hemos anunciado, no se hicieron los trabajos cuando se tenían que hacer, y ahora nos vamos a pasar todo el verano aislados. El badén provisorio que hicieron se lo llevó el agua, el puente que trajeron de Capayán no se lo utilizó, perdieron mucho tiempo y nosotros seguimos en la misma situación”, esgrimió molesto Hugo, habitante de este poblado.
A raíz de la crecida del río, los pobladores de Huaycama se quedan sin el servicio de transporte público y sin asistencia sanitaria y policial.
Con las lluvias registradas en los últimos dos días, en particular en las serranías del cordón del Ambato, el dique Las Pirquitas incrementó un poco su caudal de agua.
Esto a su vez, produjo la crecida del río Del Valle desde la presa hacia abajo por lo que se alertó a la población a tomar las precauciones del caso, sobre todo quienes viven, acampan y cruzan el río en todo su trayecto.
Por esta razón los cruces no estaban aptos para pasarlos, sin embargo hasta ayer no había ningún tipo de señalización que impida cruzar el lecho, y la irresponsabilidad de automovilistas y motociclistas sin temor desafiaban el peligro de atravesar un río crecido.
Tal es el caso del Badén del Camino de la Virgen, en el límite entre los departamentos Valle Viejo y Capital, donde motos y autos cruzaban sin mediar peligro y donde nadie alertaba de tal riesgo.
El director de Defensa Civil, por su parte, informó que la alerta por la crecida estaba vigente hasta la tarde de ayer, y que desde entonces se aguardaba que el caudal de agua de los ríos baje progresivamente.
Por otro lado, en varias calles de Valle Viejo y Fray Mamerto Esquiú, hubo anegamientos importantes a raíz de la gran cantidad de agua caída.
"En esta calle no se puso ni un metro de caño para las cloacas, así que dejen de echarle toda la culpa y excusarse que no hacen nada por esa obra. Esta calle no tiene desagüe y cada vez que llueve quedamos presos en nuestras propias casas por no poder salir, es un problema de muchos años, y nunca nos escucharon”, denunció Francisco, que residen sobre la calle Eusebio Ruso en Villa Dolores.
También en localidades de Fray Mamerto Esquiú, sobre todo aquellas de tierra en la zona de El Hueco, Sierra Brava, y otros sectores, quedaron bajo el agua tras las lluvias.
EN LA PUERTA
También el río Ambato creció considerablemente luego de las lluvias de los últimos días. La gente que acampa en el camping recibió una advertencia por posibles desbordes, que por ahora, no ocurrieron.
El oeste ya tiene energía
El apagón que se había registrado en todo el oeste provincial durante la noche del jueves, al salir de servicio la línea de 132 Kva que llega desde Villa Quinteros, en Tucumán, hasta Aconquija, pudo ser solucionado por la empresa TRANSNOA SA y a las 17 de ayer se pudo reconectar el servicio troncal que alimenta a los departamentos Andalgalá, Belén, Tinogasta y Pomán.
La falla se produjo por las intensas lluvias que se produjeron en la zona cercana a Alpachiri, en el sur tucumano, donde el derrumbe de parte de un cerro tiró abajo de nuevo una torre que sostiene el tendido de alta tensión.
Esta situación es similar a la que se produjo en marzo del año pasado, cuando todo el oeste se quedó sin energía por el corte de la línea.
De igual manera, el desperfecto del jueves se suplió con los generadores que se pusieron en marcha pocos minutos después de que se cortara el suministro.
Sin techo y pasados por agua
TINOGASTA - El matrimonio con 4 pequeños de entre 12 años y 7 meses, que se quedaron sin techo en un dormitorio porque se les cayó a raíz de la lluvia hace ya dos semanas, pidió a las autoridades que tengan celeridad en la terminación de la construcción o la ayuda con los materiales, para poder volver a resguardar sus pertenencias que se encuentran a la intemperie. Dada esta situación, esta familia continúa mojándose con las lluvias. En la actualidad se encuentran hacinados en la única habitación que les quedó de la casa.
El techo que se cayó era de loseta y tenía más de 30 años de antigüedad y estaba en mal estado de conservación.