Más que por la inseguridad, el año que acaba de terminar quedará marcado para siempre por el regreso de modalidades que parecían olvidadas –como los secuestros extorsivos bien planificados– y por la confirmación de que los cárteles internacionales de la droga tienen una importante base de operaciones en el país. Aquí, los diez casos más resonantes de 2015:

1-El secuestro de Rebagliati. Dueño de la empresa CINTRA (dedicada a la limpieza ambiental, ubicada en Tres de Febrero), al empresario Daniel Rebagliati lo secuestraron el 28 de abril y lo tuvieron cautivo ocho días, hasta que su familia pagó un rescate de 1.800.000 pesos. En el medio amenazaron con cortarle un dedo, lo picanearon y lo sometieron a simulacros de fusilamiento. Por el caso hubo una docena de detenidos, incluido un ex policía de la Federal.

 

2-La condena a Mangeri. El 15 de julio tuvo su capítulo final el crimen de Angeles Rawson (16), ocurrido el 10 de junio de 2013 en su edificio de Palermo, con una condena a prisión perpetua. La Justicia determinó que el portero Jorge Mangeri la atacó cuando volvía del colegio, intentó violarla y, como la adolescente se resistió, la estranguló hasta matarla. Luego la metió dentro de una bolsa de basura y la sacó junto a los residuos del edificio, lo que provocó que el cuerpo recién fuera hallado al día siguiente en la planta de la Ceamse de José León Suárez, en San Martín.

 

3-Glew: una muerte inexplicable. Melisa Tuffner (22) apareció embarrada y con dos golpes brutales en la cabeza, tirada en una calle de tierra de la localidad bonaerense de Glew. Luego de tres días de agonía, en la madrugada del 22 de julio terminó muriendo en una clínica porteña. Había salido de su casa para ir a un centro comunitario y de allí planeaba ir a la cancha de Temperley con su familia. Nunca llegó. Un mes y medio más tarde, gracias a las cámaras de seguridad, identificaron al autor: un vecino de su familia, que la había seguido, la había atacado –por causas nunca aclaradas– y la había matado a golpes. Un día antes de entregarse, el hombre había ido a su casa y le había dado el pésame a su padre.

 

4-El matrimonio de policías. El doble asesinato se convirtió un símbolo de la inseguridad en el Conurbano: el 1° de septiembre, el oficial ayudante de la Bonaerense Sergio Fernández (29) y su esposa, la sargento Betiana Bringas (30), fueron sorprendidos frente a su casa de Laferrere (La Matanza) por ladrones que quisieron robarles el auto. Se defendieron y los asesinaron a tiros. Dejaron una hija de 4 años.

 

5-El final de “Carbón Blanco”. El 17 de septiembre, un tribunal federal del Chaco condenó a penas de entre 12 y 21 años de prisión a los cinco acusados del mayor contrabando de cocaína a Europa de la historia: una tonelada de droga enviada en cargamentos de carbón. Las penas más altas fueron para el abogado Carlos Salvatore y su secuaz, el ex empresario futbolístico –y autodenominado “testaferro” de Julio Grondona– Patricio Gorosito. En los meses siguientes, los fiscales del juicio recibieron amenazas.

 

6-El “narco-arroz”. El caso se hizo público el 22 de septiembre: había caído una banda que intentaba exportar cocaína impregnada en arroz rumbo a Africa, disfrazada bajo el envío de alimentos a ese continente en el marco de un plan de ayuda de Naciones Unidas, “Hambre Cero”. La organización estaba liderada por dos hermanos colombianos: Erman y Willians Triana Peña –hoy prófugos–, con estrechísimos vínculos con miembros del temible cartel del Norte del Valle. Ambos operaban en nuestro país asociados con un ex integrante de la Policía Nacional de Colombia, Carlos Olmedo Silva Cárdenas. Los allanamientos concluyeron con 12 detenidos –9 de ellos, colombianos– y una larga lista de prófugos con pedido de captura.

 

7-La caída del juez Reynoso. Hasta el 3 de noviembre, el juez federal de Orán (Salta), Raúl Reynoso, era considerado un paladín antidrogas. Pero ese día se supo que la Justicia lo imputaba por haber ayudado, protegido y liberado a narcos a cambio de jugosas coimas, tales como la entrega de un campo de 700 hectáreas. Si no lo detuvieron fue por sus fueros, pero sí cayó una red de abogados y empleados judiciales que habrían actuado como intermediarios en las gestiones. El magistrado, que sostiene su inocencia, está suspendido en su cargo, pero libre.

 

8-Triángulo amoroso fatal. En la madrugada del 20 de noviembre, un triángulo amoroso que combinaba sexo, celos y millones terminó en asesinato. Ese día el empresario y corredor de autos Gastón Berganza (34) salía de un restorán de Pilar junto a su mamá, su novia, María Laura Alayón (40) y una hija de la mujer cuando los sorprendió un hombre. Era Diego “El Oso” Feinmann (33), hermano del periodista Eduardo Feinmann y ex novio de Alayón, quien había llegado desde Capital en un taxi con un amigo. Según la versión del empresario, el recién llegado se les fue encima y atacó su auto –un lujoso BMW– a golpes. Su respuesta fue sacar una pistola Glock calibre 40 y matarlo de tres tiros. Berganza estuvo preso un mes, hasta que el 23 de diciembre el juez Nicolás Ceballos cambió sorpresivamente la calificación del caso, consideró que sólo había cometido un “exceso en la legítima defensa” y lo liberó.

 

9-Los crímenes de La Salada. Durante 2015, la guerra por los negocios de la feria La Salada sumó cuatro crímenes, unos pocos detenidos y varias causas judiciales. La violenta seguidilla comenzó en febrero, con la muerte de Pablo “Bocón” Zárate (30). Lo mataron de un tiro en la nuca en pleno acceso a la feria, mientras intentaba defender los puestos ilegales de su hermano, asesinado en noviembre de 2014. Pocos días después, Luis “Pinky” Rodríguez (32) fue acribillado a balazos en una estación de servicio de Ingeniero Budge. El móvil habría sido el manejo de las combis truchas que trabajan en la zona. En junio, Walter “El Ruso” García (42) recibió un balazo mortal en la espalda. Antes de su muerte, había reclamado más participación en las ganancias. No se lo perdonaron. El último crimen fue cometido el 9 de diciembre. Gustavo “El Cejudo” Mariano (40), uno de los pesos pesados de La Salada, fue ejecutado por sicarios en Camino Negro. Una hipótesis apunta a barras de Boca que unos días antes habían sido detenidos por una causa que también involucra a dos policías.

 

10-La condena al sommelier. El 21 de diciembre, un tribunal oral condenó a perpetua al sommelier Luciano “Lucky” Sosto (36), ex propietario de restoranes e hijo del dueño de “Guido’s Bar”. La imputación: haber asesinado a su mamá, Estela Garcilazo, el 26 de diciembre de 2013 en el edificio de Palermo donde vivían. Según la acusación fiscal, luego de una madrugada de sexo y drogas, Sosto la habría asfixiado porque la mujer le habría negado dinero para comprar más cocaína. El sommelier jura su inocencia y sostiene que a su mamá la mató alguien que se metió en su departamento y la violó.