Sabado
23 de Noviembre de 2024
10 de septiembre de 2015
El dueño de la empresa InfoFoj, Francisco Jiménez, dijo que hizo su trabajo. "Si baja la tensión o se corta la luz no es culpa mía. Yo me confié porque vi que tenían un grupo electrógeno", sostuvo
Francisco Jiménez, dueño de la empresa InfoFoj, establecida en Santiago del Estero y encargada, por la Gendarmería, del sistema de cámaras y software para monitorear el depósito de edificios de la Junta Electoral en Tucumán, habló. “Me avisaron sobre la hora, no sé cómo llegaron a mí. Debe ser algún cliente que me recomendó”, explicó Jiménez sobre la decisión de contratarlo para garantizar la transparencia de los comicios en la provincia del norte.
Su firma rubrica el informe que detalla la pérdida de varias de las filmaciones de las cámaras de seguridad, tras la presentación del opositor Acuerdo para el Bicentenario que realizara con la intención de observar los videos donde se custodiaban los votos. El pedido incluyó las filmaciones desde el día anterior a la realización de los comicios hasta las 48 horas posteriores.
Tras la denuncia de la pérdida, el propio Jiménez dijo en declaraciones a Periódico Móvil: “Yo me confié porque vi que tenían un equipo electrógeno y supuse que iban a hacer como se hace siempre: conectarlo para que dé electricidad automáticamente si había una baja de tensión o un corte de luz”.
“Hice mi trabajo, hice lo que me pidieron. Me pidieron que instale todo y que filme, pero si baja la tensión o se corta la luz no es culpa mía que ellos hayan tenido un generador y no lo hayan conectado”, se defendió el hombre, que asegura que tardó en entregar el informe debido a que “estaba tratando de salvar la mayor cantidad posible de videos, pero hay muchos que no pude rescatar. Quizás alguien con más medios pueda hacer algo”.
Según su interpretación, es responsabilidad de Gendarmería y de la Junta Electoral el control del normal funcionamiento de las cámaras: “Ni si quiera me avisaron durante esos dos días que estaban teniendo problemas de tensión como para que yo les diga lo que tenían que hacer”, cerró el hombre que instaló las cámaras y todo el sistema el jueves previo a las elecciones y volvió a Santiago del Estero.