No le fue fácil al ministro de Educación, Ciencia y Tecnología, José Ariza, llegar hasta el tercer piso de la Legislatura provincial, hasta la sala de reuniones de las comisiones, para participar de la convocatoria que le hizo la Comisión de Educación de la Cámara Baja, para abordar un temario que fue propuesto por los legisladores de la oposición, pero que sin embargo, obtuvieron el acuerdo del resto de los integrantes tanto del oficialismo como del bloque Frente Tercera Posición.

En primer lugar, porque en el ingreso lo aguardaba un nutrido grupo de docentes que se autoconvocaron para darle "el recibimiento" que consideraban adecuado: lo acompañaron a insulto limpio (lo más suave que se oyó decir es que deje su cargo) desde que llegó al edificio, alrededor de las 19, hasta que salió cerca de las 21.45. Y los gritos no fueron solo para él sino también para sus subsecretarios, Ricardo Cuello y Oscar de la Barrera, y para la muy discutida directora de Recursos Humanos del ministerio, Belkys Vera.

El grupo de docentes manifestantes, muchos de ellos de Capayán y de escuelas de la periferia de la Capital, acordó mientras cortaba la calle frente a la Legislatura, organizar un corte de ruta sobre el que aún no se dieron precisiones.
En el encuentro estuvieron casi todos los integrantes de la comisión: Gabriela Velazco (FV), Claudia Vera (FCS), Raúl Giné (FCS), Marita Colombo (FCS), Víctor Luna (FCS), Laura Arrieta (F3P), Oscar Pffeifer (FV), Jorge Lagoria (FV), Selva Segura (FV), Jorge Sosa (FCS) (Griselda Losso estuvo ausente) y la presencia de los oficialistas Hugo Argerich, quien es presidente del bloque, y Cecilia Guerrero.

"La reunión fue extensa y no se llegó a abordar el temario que se había propuesto, al punto que quedaron muchos aspectos por preguntarle al ministro sobre los resultados de su gestión", señalaron dos diputados que consultó este diario al cerrar la reunión.

Aún así, coincidieron en señalar que muchas preguntas rondaron en la resolución del conflicto con los gremios y la posibilidad de recuperar el tiempo perdido en las aulas, que ya con la presente jornada son 27 días solo por paros docentes.

La oposición tuvo oportunidad de señalarle al ministro que al haber vetado el nomenclador que se aprobó el año pasado se perdió la posibilidad de llegar a un acuerdo ahora. En ese punto Ariza contestó que otorgar el aumento actual implicaría incrementar unos 66 millones de pesos mensuales al desembolso salarial.

En un momento de la reunión, uno de los legisladores opositores trató de "irresponsable" al ministro Ariza por incentivar a concurrir a las escuelas a los alumnos cuando sabe que no hay personal para contenerlos. El mismo legislador le preguntó al ministro si estaba "al frente de las negociaciones con los gremios". Fiel a su estilo, Ariza contestó que "no le crea a los medios", y apuntó que "el Gobierno está con las negociaciones con los gremios docentes". No se sabía entonces, que prácticamente a la misma hora se había reunido el ministro Saadi con los integrantes de la intersindical para recibir la contrapropuesta.
 

 Día del Maestro, de luto

El acto oficial que se organizó en la ciudad para celebrar el día del Maestro, que se hará hoy a las 10 en la plaza principal, se transformará en una protesta contra el Gobierno, dado que todos los docentes acordaron llevar una prenda negra como signo de luto y se brindará con agua. Paralelamente, el acatamiento al paro durante la jornada de ayer fue importante, con un 90 por ciento de impacto en las escuelas primarias y secundarias, y del 60 por ciento en el nivel terciario

El delegado de ADUCA en la ciudad, Miguel Trejo, dijo sobre la propuesta que elevó el Gobierno que "va en contra de la docencia. En el caso de los docentes que trabajan en escuela de doble jornada con una carga horaria del doble quedaría con el valor de cargo en 361 puntos. Lo único que diferenciaría entre uno y otro cargo es por 60 puntos, lo que es totalmente injusto".