La joven de 19 años, que acusó a Norberto Fernández (54) en la localidad de San Fernando de haberla violado, relató en detalle el horror al que fue sometida la madrugada del 14 de julio de 2013 cuando llegaba a su casa. Antes del comienzo de una nueva audiencia del juicio oral en el TOC 2 de San Isidro, la víctima apuntó contra la justicia por los beneficios que le otorgaron al acusado y dijo que "la defensa del presunto abusador busca defenestrarla" para restarle credibilidad.

"Había salido de mi casa, a trabajar y después me fui con mis amigos a una pizzería. Luego de tomarme dos colectivos para volver a mi casa, iba caminando por la calle 3 de Febrero. Para un auto y baja un señor con un arma y me dice: "Esto es un secuestro". Me inventa que me iba a llevar a una red de trata. Que me estaba salvando y le creí. Todo el tiempo me decía que me callara", detalló la joven al referirse a los momentos previos al ataque.

"Frenó. Me había puesto en los pies del acompañante. Luego me sentó, me tapó los ojos y ahí sí vino toda la parte fea. Me obligó a masturbarlo y a que le practique sexo oral, hasta que me ahogué. Me daba besos. Fue algo superperverso y después me penetró hasta que eyaculó. Me di cuenta de eso después por las pericias. En el momento no lo noté. Me dijo que no usó profiláctico porque no tenía ninguna enfermedad. Me preguntó si era virgen. Yo le contesté con la verdad", prosiguió la víctima.

La semana pasada, el remisero salió nuevamente favorecido por la justicia. Por segunda vez se suspendió su juicio; esta vez por pedido de la defensa. Pero esto ya había pasado cuando el 8 de julio también se canceló porque el imputado –que puede pasar 20 años en prisión- estaba prófugo.

Al respecto, la joven expresó su deseo de que la defensa del acusado "no intente suspender el juicio". "Es la audiencia más difícil, vamos a ver con qué se viene la defensa", explicó la joven. "Intentaron mancharme, hablaron mal de mí. Estoy muy indignada, creo que lo están encubriendo. Esperamos que no intenten suspender el juicio, y que después, se le dé una condena alta: esperamos 20 años, por el agravante del arma", remarcó", acusó la chica.

Dijo que fue sometida ya a muchas humillaciones por parte de la familia de Fernández. "No sé qué va a pasar ; me pasó la audiencia pasada, dicen cosas feas de uno, quieren dar vuelta las historias, se pone más en juego lo emocional", agregó.

La joven, incluso, se animó a criticar a la Justicia y sostuvo que "los tiempos judiciales hay que cambiarlos". "Dos años para la víctima es mucho. Y hablo con muchas. A todos nos parece mucho el tiempo. Esta justicia garantiza muchos derechos al violador. Si se fugó fue porque la justicia lo permitió", aseveró.

De igual forma apuntó contra la defensa del remisero. "Es la primera vez que declaro que tengo miedo. Si bien estuvimos esperando. Ayer me pasó que no quería que llegue el día hoy. Todo lo que va a decir es mentira. Es doloroso que me vayan a criticar. Lo que está buscando es defenestrarme. Si se metió en mi facebook para buscar pruebas que no tiene. Todas mi fotos estoy sonriendo y no estoy como el quería que esté. Igual no importa que una mujer tenga ese tipo de fotos. No tiene por qué venir y violarla", dijo.

El abuso duró 40 minutos y después la mujer se trasladó a su casa, desde donde fue con su madre a realizar la denuncia a la comisaría. El acusado huyó antes de empezar el juicio en su contra, y la joven pidió que se fijara una recompensa para encontrarlo; finalmente se entregó a la Justicia.