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SOCIEDAD
4 de agosto de 2015
Tiene apenas 5 años,Mateo alcanzó los 116 kilos, hasta que hace un mes fue internado en un hospital en Santa Fe. "Comía todo el día, no tenía límites", dijo su madre
"Una tarde no fui a trabajar y lo vi caminar y no pudo llegar de la pieza a la cocina", afirmó la Silvia, la madre de Mateo, el menor de 5 años que hace un mes llegó a pesar 116 kilos y debió ser internado de urgencia en el hospital de niños Orlando Alassia donde recibe un intensivo tratamiento en pos de cuidar su salud.
Los primeros chequeos confirmaron que padecía "diabetes, hipertensión arterial, colesterolemia e hiperglucemia", según explicó en su momento Pablo Ledesma, uno de los directores de ese centro de salud. Y aclaró que para esa edad, el peso promedio no supera los 20 kilos.
la madre de Mateo señaló que su hijo "comía todo el día, no hacía gimnasia, y de la escuela volví a casa a mirar tele". Según su impresión, una de las razones por las que se llegó a ese estado es porque ella trabajaba mucho y "él estaba en casa constantemente y no hacía actividad física".
Osvaldo González Carrillo, director médico ejecutivo del hospital, aclaró que el menor "tiene toda una situación clínica que hace que sea un paciente grave". Sin embargo, explicó que la familia ahora "está mucho más consciente del problema y está apoyando mucho más la situación de Mateo".
"Él es loco de los guisos, las carnes y el pan. Ahora no come pan, la carne es un pedacito, y no lo extraña. Yo antes tenía miedo. No le dieron pan dos días y yo le dije a los nutricionistas si no le podían dar una galletita", reconoció la madre sobre el tratamiento de Mateo.
La mujer contó que antes de llevar el problema ante especialistas, el niño comía todo el día. "No tenía límites. Nosotros somos de comprar muchas cosas, y eso me enseñaron ahora que hay que tener un límite, verduras y gelatina", añadió.