Tras la tercera erupción del volcán chileno Calbuco en menos de ocho días, el viento arrastra la columna de cenizas hacia el sudeste, en dirección a El Bolsón y Esquel. Mientras que en Bariloche descartan que la situación los afecte, el gobierno de Neuquén convcó a un comité de crisis para las 18. El encuentro estará encabezado por la vicegobernadora Ana Pechen.

Más temprano se reunió el Comité de Emergencia de Bariloche, que desde el martes estaba en "guardia pasiva". Al término del encuentro, se informó que la columna de cenizas tiene una altura entre 4 y 6 kilómetros, mucho menor de la que emanó en las erupciones anteriores y que superó los 15 kilómetros.

En la ciudad de Neuquén, Aerolíneas Argentinas suspendió sus actividades mientras que Lan opera con normalidad. Según la prensa local, se suspendieron un par de vuelos en Bariloche, pero Aeropuertos Argentina 200 informó que los percances no estuvieron vinculados a la erupción.

A su vez, el aeropuerto de San Martín de los Andes, una de las localidades más afectadas por la caída de cenizas, permanecía hasta hoy cerrado, a la espera de que se terminen las tareas de limpieza. Salvador Vellido, secretario de Turismo de esa localidad, estimó el martes en diálogo con Infobae que era improbable que abra antes de la próxima semana.

Por su parte, el intendente de Villa La Angostura, Roberto Cacault, dijo a InfobaeTV que "hasta ahora es todo muy alentador". Y añadió que es probable que las cenizas no crucen la cordillera. "Los vientos nos han favorecido", advirtió.

El Servicio Nacional de Geología y Minería de Chile (Sernageomin) informó que el volcán entró a las 13:09 a su "tercer pulso eruptivo, asociado a movimiento de magma", por lo cual se estableció una "alerta roja".

La erupción ocurrida la semana pasada en el Calbuco provocó caída de cenizas principalmente en las ciudades argentinas de San Carlos de Bariloche, San Martín de los Andes y Villa la Angostura, algo que podría repetirse en las próximas horas.