Sabado
20 de Abril de 2024
DEL INTERIOR
23 de diciembre de 2015
El intendente y trabajadores alcanzaron un acuerdo, por el cual, el Ejecutivo dio marcha atrás con las medidas anunciadas esta mañana y los trabajadores mantendrán sus puestos de trabajo.
El acta-acuerdo firmada pasado el mediodía, anula las medidas anunciadas esta mañana, por lo que todos los trabajadores que habían sido sesanteados mantendrán sus puestos de trabajo y en la condición de revista en la que se encontraban. Además, los sindicalistas se comprometieron a acompañar a Jalile para realizar las gestiones necesarias ante el gobierno Provincial para conseguir los fondos que le permitan cumplir con el pago de sueldos.
Luego de una mañana llena de negociaciones y disturbios, el Ejecutivo de Valle Viejo, encabezado por Gustavo Jalile y los trabajadores, quienes se manifestaban debido a que se había anunciado el despido de todos los empleados que habían sido nombrados en planta durante el presente año, alcanzaron un acuerdo y dieron por finalizado el conflicto.
Los empleados consiguieron que la intendencia de marcha atrás con las medidas anunciadas y que todos los trabajadores mantengan sus puestos de trabajo. Ahora se debe oficializar el decreto, el cual abalará los nombramientos hechos por Natalia Soria durante el 2015.
A su vez, en el acuerdo firmado, los sindicatos se comprometieron a acompañar a Jalile para que realice las negociaciones pertinentes con el Ejectuvo provincial, con las cuales se buscará conseguir aportes económicos que regularicen la economía municipal y le permita cumplir con los trabajadores.
La mañana estuvo cargada de tensión, sobre todo cuando los trabajadores, quienes quemaron gomas y cortaron Av. Presidente Castillo, intentaron ingresar al municipio y fueron contenidos por la policía.
Esta mañana, la intendencia, había procedido a oficializar dos decretos por los cuales se les daba de baja a unos 400 empleados que habían sido nombrados por Soria en el final de su gestión y que, según había anticipado Jalile, generaban un gasto elevado que obligaba al municipio a destinar más del 100% de la coparticipación municipal en el pago del sueldo (125% aproximadamente).