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PERSONAJES

30 de abril de 2019

Curiosidades sobre Leonardo da Vinci que quizá no conocías

Este 2 de mayo de 2019 se cumplen 500 años de la muerte del genio florentino del Renacimiento italiano.

Arquitecto, escultor, ingeniero, inventor y pintor... Leonardo da Vinci nació fuera del matrimonio en Vinci, Italia (a las afueras de Florencia). Esta posición ilegítima de Leonardo le impidió recibir una buena educación y lo excluyó de las ocupaciones más lucrativas. Sin embargo, tales limitaciones nunca obstaculizaron (y es posible que incluso alimentaran) el deseo de conocimiento y gran ambición de da Vinci.

A los 15 años, da Vinci se convirtió en aprendiz del pintor Andrea de Verrochio en Florencia (Italia), donde sus habilidades como artista se desarrollaron, florecieron e incluso intimidaron a su mentor. Si bien siempre estuvo interesado en los inventos, fue un cambio de escenario en 1482 el motivo principal que 'desató' al inventor que llevaba dentro Leonardo da Vinci.

En busca de un ámbito de trabajo más amplio, da Vinci se mudó de Florencia, considerada la capital cultural de Italia, a Milán, una ciudad mucho más política y militarista. Allí, da Vinci se vendió a sí mismo al duque Ludovico Sforza (un líder militar exitoso llamado "el oscuro") como ingeniero militar. En la ciudad que "vivió y murió por la espada", da Vinci comenzó a desarrollar muchos de sus famosos inventos de guerra.

Pasó 17 años en Milán trabajando para el duque, inventando, pintando, esculpiendo, estudiando ciencias y concibiendo un sinfín de ideas innovadoras y atrevidas. Sin lugar a dudas, los 17 años que pasó en Milán fueron el período más productivo de da Vinci. Pero, por supuesto, todas las cosas tienen un final.

En 1499, los franceses invadieron Milán y el duque Sforza fue expulsado de la ciudad. Leonardo pasó los años restantes de su vida viajando a ciudades como Venecia y Roma para trabajar en diferentes proyectos, con una mayor concentración en su arte (comenzando por su pieza más famosa, la Mona Lisa, en 1503) y estudios en anatomía (no podemos olvidar que da Vinci llevó a cabo más de 30 autopsias en su vida).

Después de visualizar cientos de inventos, dar vida a obras de arte legendarias y hacer avances en una amplia gama de campos (que van desde la astronomía hasta la arquitectura), da Vinci murió en 1519 a la edad de 67 años.

Fue un hijo "ilegítimo"

 

Da Vinci nació en 1452 cerca de Vinci, en lo que hoy es la región italiana de Toscana. Su padre era el notario Messer Piero Fruosino di Antonio da Vinci. Su madre, Caterina, se cree que era una campesina. Sin embargo, algunos expertos creen que Caterina era en realidad una esclava propiedad de Messer Piero. Los padres de da Vinci nunca se casaron. Y cuando su madre le tuvo, el joven da Vinci vivió con ella hasta los 5 años y luego se mudó a la casa de su padre, quien se había casado con otra mujer.

 

   
Relación distante Relación distante

 

Los diarios del artista muestran que mantuvo una relación algo distante con su madre a lo largo de su vida adulta, intercambiando cartas con ella solo de vez en cuando. Eso sí; sus escritos sugieren una conexión mucho más estrecha con su padre, cuya muerte lamentó el genio florentino profundamente.

 

   
  No estaba escolarizado No estaba escolarizado

 

A diferencia de otros conocidos artistas del Renacimiento, da Vinci nunca recibió ningún tipo de educación formal. Sin embargo, recibió instrucción en el hogar sobre temas como lectura, escritura y matemáticas.

 

   
          Maravillosa naturaleza Maravillosa naturaleza

 

Al crecer en la Toscana rural, da Vinci pasó gran parte de su tiempo al aire libre, donde quedó absolutamente maravillado con el mundo natural. Sus diarios indican que tenía un interés especialmente increíble en las propiedades del agua, así como en los movimientos de las aves de presa. De hecho, el artista registró que su primer recuerdo fue de un sueño en el que un ave aterrizó en su rostro y empujó las plumas de la cola entre sus labios.

 

   
Etapa de aprendiz Etapa de aprendiz

 

No fue hasta la adolescencia cuando este artista en ciernes fue enviado a Florencia para servir de aprendiz de Andrea del Verrocchio, un destacado pintor florentino. Y no pasó mucho tiempo para que el estudiante se convirtiera en el maestro. Se rumorea que después de que da Vinci pintase uno de los ángeles en la obra de Verrocchio "El bautismo de Cristo", el artista -con mucha más experiencia- se mostró tan humilde ante el talento del joven da Vinci que prometió no volver a pintar nunca más, aunque este es un rumor que nunca se ha demostrado.

 

   
Era disléxico Era disléxico

 

Al igual que Albert Einstein, Thomas Edison o Walt Disney, Leonardo da Vinci era disléxico. Se determinó a partir de su peculiar estilo de escritura, de izquierda a derecha. También tenía ortografía errática y su hábito de iniciar proyectos que nunca acababa ha sido relacionado como una tendencia del trastorno de atención (TDA). Su hábito de escribir al revés tenía otro beneficio: el estilo hacía que su escritura fuera difícil de leer, por lo que era prácticamente imposible que alguien escarbara en sus notas y robara sus ideas.

 

   
          Muchas de sus obras quedan inconclusas Muchas de sus obras quedan inconclusas

 

Una cosa estaba clara. Da Vinci era un pintor notoriamente lento, y muchas de sus obras nunca llegaron a terminarse. Además de albergar a la famosa (y terminada) "Mona Lisa", el Museo Louvre de París es el hogar de "La Virgen y el Niño con Santa Ana", una pintura inacabada que representa a la Virgen María, un niño Jesús y la madre de María, Santa Ana. También en uno de los Museos del Vaticano está "San Jerónimo en el desierto", otra pintura no finalizada de da Vinci, que representa a San Jerónimo y su compañero, un león domado. Quizá el más intrigante de los trabajos inacabados de da Vinci es su pintura "La Adoración de los Magos", que supuestamente presenta una representación del joven artista. La pintura, que quedó incompleta en 1481, se ha mantenido en la Galería Uffizi en Florencia, Italia, desde 1670.

 

   
Muchos inventos también incompletos Muchos inventos también incompletos

 

Además de estas pinturas inacabadas, da Vinci dejó muchos inventos inconclusos. De hecho, no hay evidencia de que ninguna de las invenciones del artista fuesen construidas. Del mismo modo, ninguno de sus escritos fueron publicados mientras estaba vivo. 

 

   
¿Un procrastinador nato? ¿Un procrastinador nato?

 

Ni mucho menos. El problema de da Vinci no era que no se pusiera a trabajar o que trabajara poco, sino que estaba constantemente iniciando nuevos proyectos y descuidaba los que ya había comenzado, que raramente acababa. Además, parece que Leonardo rara vez estaba contento con su trabajo, lo que tampoco ayudaba a que estuvieran "completos". De nuevo tenemos que recordar su trastorno de atención, responsable de este comportamiento.

 

   
          Cuerpos perfectos   Cuerpos perfectos

 

Hay una razón por la que Da Vinci pintaba el cuerpo humano de manera tan realista: el artista estudió obsesivamente la anatomía del ser humano mediante la disección de cadáveres durante mucho tiempo. En una época en que el conocimiento médico en Europa era rudimentario, da Vinci fue uno de los pioneros en el campo de la documentación de la anatomía humana. De hecho, es considerado uno de los antepasados de esta ciencia.

 

   
Un ejemplo espectacular Un ejemplo espectacular

 

Podemos ver el vasto conocimiento de da Vinci acerca de la anatomía humana en su obra maestra inacabada, 'San Jerónimo en el desierto'. Colgada en los Museos Vaticanos, muestra a San Jerónimo arrodillado bajo un crucifijo; se encuentra en un paisaje rocoso y el león domado del santo yace a sus pies. Pintado en 1480, el increíble detalle del cuello de San Jerónimo con los tendones abultados y los músculos de sus hombros, revelan la obsesión creciente de da Vinci por la anatomía y la atención cercana a la fisiología humana. Está claro que su estudio del cuerpo humano a través de disecciones secretas ya hubiese comenzado.

 

   
Genial anatomista Genial anatomista

 

Entre 1507 y 1513 da Vinci diseccionó más de 30 cadáveres, llenó cientos de páginas de sus cuadernos con documentación, escribiendo más de 13.000 palabras sobre observaciones de órganos, vasos sanguíneos, huesos y músculos y los dibujó -existen 240 dibujos- como nunca antes se habían representado. Está claro que si este trabajo se hubiese publicado en vida, el desarrollo científico de la humanidad habría llevado un camino distinto pues, como hemos comentado, la ilustración anatómica de la época se encontraba todavía en una fase bastante elemental.

 

   
          El hombre de Vitruvio El hombre de Vitruvio

 

Durante su carrera, da Vinci llenó docenas de cuadernos con sus pensamientos, ecuaciones, ilustraciones, experimentos y observaciones científicas / anatómicas. El más famoso de estos bocetos es el Hombre de Vitruvio, un estudio en proporciones clásicas que nunca llegó a publicarse. Dibujado en uno de los cuadernos privados del artista alrededor de 1490

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