Sabado
23 de Noviembre de 2024
31 de marzo de 2019
Además, se posicionó en la discusión nacional del peronismo en la etapa previa a la definición de las candidaturas presidenciales.
El triunfo categórico de Sergio Uñac en las PASO de San Juan será un trampolín que le permitirá saltar de la provincia cuyana a la escena nacional con las credenciales del respaldo popular. El gobernador sanjuanino se quedó con más del 55% de los votos en las primarias y utilizará ese apoyo masivo para mostrar, puertas adentro del peronismo, que puede ser un armador clave en el último tramo previo al cierre de listas o, eventualmente, un candidato a presidente o vicepresidente con aceptación de la gente y de los dirigentes.
En las elecciones de este domingo el mandatario le sacó más de 20 puntos de ventaja al candidato de Cambiemos, Marcelo Orrego, quien hizo un aceptable papel pero que, de cara a las elecciones generales del 2 de junio, quedó muy lejos de poder pelearle la gobernación a Uñac. No hubo enfrentamientos reales en las primarias, por eso los resultados fueron una encuesta adelantada de los comicios definitorios y un mensaje al gobierno nacional. El actual gobernador tiene el camino allanado para lograr la reelección y el oficialismo nacional deberá resignarse a una nueva derrota.
Diez días atrás Uñac reapareció en la escena nacional y dejó un mensaje sorpresivo sobre sus pretensiones en el corto plazo. "Banco a Lavagna y no sería un disparate ser su vice", dijo en una entrevista televisiva. La frase retumbó con fuerza en el peronismo y en el kirchnerismo. El sanjuanino se inclinó por la candidatura del ex ministro de Economía, que aún no confirmó su decisión pero que avanza en la construcción de su proyecto político. Además, dejó en claro que Cristina Kirchner no debería postularse nuevamente a la presidencia.
El gobernador de San Juan cree en la unidad del peronismo con el kirchnerismo, aunque prefiere no hacer de su idea un pedido público reiterado. Sin embargo, considera que la ex Presidente no debe ser candidata y que su ciclo al frente de la Argentina está terminado. Se lo ha dicho a los dirigentes que lo visitaron en San Juan y también a los intendentes bonaerenses con los que se reunió el año pasado. Está convencido que el tiempo de Cristina se terminó.
Uñac admira el sistema de Estados Unidos, donde el presidente solo puede ser reelegido una vez y luego cambia de rol dentro de la política. Por eso cree que Cristina debe aportar en el armado de la opción opositora pero correrse de una posible candidatura. Hay etapas que se terminan y liderazgos que sufren desgastes. Para el sanjuanino el caso de la ex Presidente es el mejor ejemplo de ese fin de ciclo.
Ese cuestionamiento a una posible candidatura de la ex jefa de Estado y la decisión de no pegarse ni al peronismo federal ni al kirchnerismo, son una muestra de la cintura política que pretende tener para hacer equilibrio en la interna opositora. Ni con unos, ni con otros. Uñac habla con gestos, con palabras precisas en momentos determinados y, sobre todo, con resultados electorales. Si el resultado de este domingo se mantiene el 2 de junio, el sanjuanino habrá ganado las tres elecciones que afrontó en los últimos cuatro años.