A días de que fuera hallado el ARA San Juan, se espera que dos informes claves permitan conocer las razones por las que naufragó el submarino hace más de un año. Los documentos, que el Gobierno remitirá a la jueza de Caleta Olivia Marta Yáñez y a la Comisión Bicameral Especial Investigadora sobre la desaparición, búsqueda y operaciones de rescate del sumergible, del Congreso nacional, provienen no solo de la empresa Ocean Infinity, que dio con el navío, sino también de la Organización del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (CTBTO), en Viena.

Durante las primeras horas del sábado, la Armada Argentina y el Ministerio de Defensa anunciaron que, luego de cumplirse un año de su última comunicación, habían encontrado al submarino ARA San Juan. Tras este hallazgo, se sucedieron los mensajes presidenciales y las palabras de los familiares, tanto en tierra como en el buque, de dolor, nostalgia y angustia.

Sin embargo, se espera que estos dos informes puedan llevar un poco de claridad a lo ocurrido, ya que, según afirmó Infobae, cuentan con "elementos contundentes". Uno de ellos es el mapeo hidrográfico que realizó el buque Seabed Constructor en el lugar donde encontraron al sumergible y cuenta con unas 67.000 fotografías en HD. El otro vendrá desde Viena y será el que realizó y profundizó la Organización del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares sobre la señal acústica que habría emitido el ARA San Juan.

Es por eso que tanto la cartera que lidera Oscar Aguad como la Armada nacional se encuentra confeccionando estos documentos, aunque la rapidez en su presentación depende de estos actores externos, siendo que en el caso de la empresa que encontró al sumergible será en diciembre, ya que anticiparon que tardará entre 15 o 20 días aproximadamente, tiempo que podría acortarse si Yáñez eleva un pedido judicial de urgencia.

"Cualquier elemento que se encuentre en las inmediaciones del sumbarino o los detalles del casco y el resto del buque serán fundamentales para determinar las causales del hundimiento", aseguró un funcionario nacional a Infobae, mientras que el Ministerio de Defensa le solicitó a la Cancillería busque avanzar con la burocracia para obtener el documento del CTBTO, el cual habría tenido una diferencia de solo 15 kilómetros del lugar de donde fue hallado.
En tanto, Rafael Grossi, embajador argentino en Viena y miembro del organización radicada en esa ciudad, destacó a dicho portal que "todo el hallazgo confirma que los datos que habíamos aportado estaban en lo cierto. Ubicamos esa anomalía hidroacústica apenas a 15 kilómetros de donde fue hallado el submarino".