Jueves 18 de Abril de 2024

SOCIEDAD

31 de octubre de 2018

Dos aperitivos 'de miedo' para la noche de Halloween

Si vas a hacer una fiesta de Halloween, no puede faltar una buena mesa de aperitivos. Aquí te proponemos dos recetas terroríficas para que os chupéis los dedos. ¡Toma nota!

La noche de Halloween es una oportunidad única para reunirse con amigos y preparar una divertida y terrorífica cena en casa. Decoramos la casa, preparamos disfraces pero, ¿por qué no personalizar la comida?   A continuación os proponemos dos recetas de aperitivos con los que sorprenderéis tanto a niños como a pequeños. Por un lado, las Dark Burger, es decir, hamburguesas con pan negro y, por otro lado, panes de calabaza, que además de la tradicional forma de las calabazas de Halloween tendrán también su sabor Receta de pan de mini hamburguesas para Halloween Ingredientes para las mini hamburguesas:   500 g de harina de fuerza 10 g de sal 20 g de azúcar 10 g de levadura fresca Levital 125 ml de agua 1 huevo 125 ml de leche entera 25 ml de aceite de oliva Semillas de sésamo 2 sobres de tinta de calamar

Preparación de las minihamburguesas:

Comenzaremos deshaciendo la levadura Levital en la mitad de la leche. Esta debe estar templada y reservamos durante unos minutos. En un recipiente, mezclamos el resto de ingredientes: agua, aceite, la leche restante y la tinta de calamar. En función de la intensidad de color que busquemos, echaremos uno o dos sobres.

En otro bol, formamos un volcán con la harina y el azúcar. Es el momento de recuperar la levadura disuelta que ponemos en el centro junto con el resto de ingredientes. Mezclamos todos los ingredientes con la ayuda de un tenedor hasta obtener una masa elástica y pegajosa. Cuando lo hayamos conseguido, pintamos un bol con aceite de oliva y colocamos la masa. Tapamos el bol con un paño y dejamos reposar unos 90 minutos aproximadamente.
Cuando haya transcurrido este tiempo, amasamos ligeramente para quitar el exceso de aire.

Después, cortamos la masa en la medida que queramos que sean nuestros panes. Damos forma de bola a cada una de las porciones y aplastamos ligeramente para que salgan planas como los tradicionales panes de hamburguesa.

Es el momento de dejar reposar la masa de nuevo. Para ello, colocamos los panes en la bandeja de horno con un espacio significativo entre ellos ya que durante el reposo nuestros doblarán su volumen. El tiempo de reposo rondará la hora aproximadamente. Mientras tanto, precalentamos el horno con calor arriba y abajo a 220ºC.

Cuando los panes hayan aumentado de tamaño, los pintamos de agua con la ayuda de un pincel y les ponemos el sésamo por encima. Bajamos la temperatura del horno a 200ºC y metemos los panes entre 12 o 15 minutos. Como cada horno es diferente, el tiempo de horneado siempre es orientativo, os recomendamos vigilar periódicamente los panes para evitar que se quemen.

© Pinterest

Receta de pan de calabaza para Halloween

Nuestra segunda propuesta son unos panes de calabaza ¡con forma de calabaza! Esta receta sorprenderá a todos los invitados por su característico sabor así como lo original de su forma.

Ingredientes del pan de calabaza:

  • 500 g de harina de fuerza
  • 20 g de azúcar
  • 300 g de calabaza cocida o asada
  • 3 cucharadas de aceite de girasol
  • 10 g de sal
  • Una pizca de pimienta

 

Preparación del pan de calabaza:

En un cuenco echamos la calabaza asada o cocida. En el caso de que optes por la última opción, es importante que quede bien escurrida para evitar los excesos de humedad. Trituramos la calabaza con la ayuda de una batidora hasta que nos quede la textura similar a la del puré.

A continuación, añadimos la levadura fresca deshaciéndola con la ayuda de los dedos. En este mismo recipiente, añadimos la harina de trigo, la pimienta, el azúcar y las 3 cucharadas soperas de aceite. Removemos bien hasta que los ingredientes queden totalmente mezclados. Cuando empiece a compactarse, añadimos la sal. Llegará un momento en el que no podremos continuar removiendo con la cuchara o pala de cocina y tendremos que continuar mezclando los ingredientes con las manos. A continuación, enharinamos la encimera o mesa de trabajo y continuamos el amasado en ese espacio hasta que nuestra masa deje de estar pegajosa.

Una vez lo hayamos conseguido, damos forma de bola a la masa y la colocamos de nuevo en el bol. Lo tapamos con un paño de cocina y dejamos que la masa repose hasta que su tamaño haya aumentado notablemente, aproximadamente 1 hora.

Cuando lo haya hecho, amasamos ligeramente de nuevo durante unos minutos y dividimos la masa en diferentes porciones a las que daremos forma redondeada. Hacemos un agujero en el centro del pan y con la ayuda de un cuchillo, realizaremos cortes alrededor que vayan desde arriba hasta debajo de los panes. Cuando hayamos realizado esta operación con todos los panes, los dejamos reposar de nuevo hasta que doblen su tamaño.

Mientras tanto, precalentamos el horno a 220ºC. Cuando los panes hayan duplicado su tamaño, les colocamos, clavado, un anacardo con el centro superior de la masa que está en la bandeja del horno y con la ayuda de un cuchillo, hacemos unos cuantos cortes en forma de cruz sobre la superficie de las piezas. Horneamos durante unos 30 minutos aproximadamente y ¡listo!

 

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