Una vez más, el edificio escolar sito en calle Santiago del Estero Nº 1570, en la zona sur de la ciudad recibió la desagradable “visita” de los delincuentes.  En la oportunidad, los desconocidos atacaron el sector de la secundaria desde donde se llevaron los ventiladores de techo de las aulas.

Fuentes policiales consultadas por este diario informaron que el ilícito fue denunciado por un auxiliar docente de apellido Coronel, en la Unidad Judicial Nº 2, en las primeras horas de la mañana de ayer.

Según se conoció, alrededor de las 6.45 horas, en circunstancias de encontrarse el denunciante realizando su trabajo en el interior del edificio escolar, se dirigió al ala norte de la escuela General San Martín 353, donde se percató  de que en una de las aulas del segundo año, tercera división, personas desconocidas se habían robado el ventilador de techo, tratándose de uno de tamaño chico, el que se encontraba empotrado en la pared este del aula, sospechando que el ilícito se haya producido entre la noche del lunes y la madrugada de ayer, en circunstancias que la escuela se encontraba con sus puertas cerradas.

Tras advertir el ilícito, el auxiliar docente se comunicó con la policía, acudiendo al lugar los efectivos de la Comisaría Segunda, quienes tras corroborar los dichos del denunciante, dieron participación al personal de la Unidad Judicial Nº 2, quienes labraron, conjuntamente a los peritos, el trabajo de rigor correspondiente.

Por otra parte, las mismas fuentes indicaron que esta sería la décima vez en que la escuela General San Martín Nº 353 es blanco de la inseguridad.

En un domicilio

Otro importante ilícito lo denunció la familia Navarro en el Precinto Judicial Nº 8. Entre la 1.30 y las 4.00 de la madrugada de ayer, personas desconocidas ingresaron a su domicilio, sito en el barrio 50 Viviendas Norte Lic. 38/04 y previo a violentar una puerta trasera, ingresaron y se apoderaron de distintos elementos. En la denuncia, la familia damnificada hizo mención al robo de un televisor de 50 pulgadas, una computadora Notebook, una pava eléctrica y una luz robótica.

LA UNION