Ernesto Clarens no terminó de contar todo lo vivido durante los 12 años de krichnerismo y de recaudación ilegal de coimas. En esta oportunidad detalló a donde fueron destinados unos $100 millones, del total de $200 millones obtenidos como fruto de la asociación ilícita. El plan Sueños Compartidos de Madres de Plaza de Mayo y la empresa Gotti se suman a los destinos junto con los ya conocidos como: el bolsillo de los Kirchner, las campañas electorales y la agrupación Justicia Legitima.

Según su declaración, el financista recibió órdenes del exsecretario de Obras Públicas, José López, para que derivara $30 millones al plan Sueños Compartidos en el 2013 cuando estalló el escándalo del desvío de $200 millones de fondos públicos del plan vivienda de Sergio Shoklender.

 
También contó que, a pedido de Cristina, apodada “la araña”, recaudó $70 millones para ayudar a la constructora Gotti que, tras la muerte de su dueño Victor Gotti, pasó a estar controlada por Lázaro Báez. Ese dinero se utilizó para tapar los agujeros que el ex-dueño tuvo que pagar a un estudio de abogados de Mendoza.

Este dinero, como en otras ocasiones anteriores, fue entregado al secretario de Néstor Kirchner, el difunto Daniel Muñoz, en habitaciones del hotel Panamericano o el Faena; o bien en el departamento de los Kirchner ubicado en Recoleta. Si bien, admitió que no conoció personalmente a los dos ex-mandatarios, aseguró que tanto Cristina como Néstor, apodado 'Rico McPato', estaban al tanto de los pagos que a él le encomendaban por terceros.

 
Además, contó que todos los viernes los bolsos con dinero eran transportados en aviones oficiales desde la besa militar de aeroparque hasta Ríos Gallegos o la casa de los Kirchner en El Calafate. Incluso, relató que en una oportunidad llegaron con cajas tan grandes a la casa de Los Sauces que no entraban por la puerta principal. Entonces, tuvieron que meterlas por las puerta de la cocina y hubo sorpresa de los cocineros y otros empleados.

Por otro lado, el financista desmintió haber sacado dólares fuera del país o haberla transportado en lanchas hasta Uruguay. Argumentó que no era necesario salir del país para mover dinero.

Estas nuevas confesiones llegan cuando el juez de la causa, Claudio Bonadio, se encuentra redactando las resoluciones por las cuales procesará con pedido de desafuero y detención a Cristina Kirchner y al resto de los imputados en la causa. Además, comenzará la segunda etapa de indagatorias que llevarán hasta los tribunales a empresarios que hasta el momento no aparecían en la causa o que ya declararon pero deberán volver a hacerlo.