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INTERNACIONALES
8 de febrero de 2017
La Minsitra de Seguridad recibió en su despacho a la comitiva de Bolivia, enviada especialmente por el Presidente Evo Morales para discutir los términos de la modificación de la Ley de Migraciones.
Señaló a los ciudadanos bolivianos como parte responsable del aumento del narcotráfico en el país y ayer debió recibir en el Ministerio de Seguridad a la delegación de Bolivia que envió el presidente Evo Morales. La ministra Patricia Bullrich encabezó el encuentro, pero esta vez reculó y no insistió con las afirmaciones que los funcionarios del país limítrofe habían calificado como "estigmatizantes".
Acordaron para dentro de los próximos 15 días una reunión técnica donde se abordará el decreto que modifica la Ley Migratoria argentina.
En diálogo con "Crónica", uno de los integrantes de la delegación gubernamental de Bolivia que llegó al país esta semana, el presidente de la Cámara de Senadores, José Alberto Gonzales, aseguró que "nos hemos encontrado con un buen ambiente, de muy buen ánimo".
Si bien la ministra argentina había apuntado a los ciudadanos "bolivianos, paraguayos y peruanos" como integrantes "del 33 por ciento" de los presos por narcotráfico, frente a los integrantes del gobierno de Bolivia privilegió mantener una buena relación bilateral, aunque tampoco se habría disculpado por sus dichos.
La controversia
Al Ministerio de Seguridad llegó la comisión formada por Gonzales, el ministro de Desarrollo Rural, César Cocarico, y el viceministro de Comercio Exterior, Clarems Endara. Todos con el objetivo de verificar la situación de los residentes bolivianos luego de la aprobación de la nueva norma migratoria argentina.
"Las personas que tienen antecedentes o cometieron delitos no son bienvenidas", dijo días atrás Bullrich, al tiempo que aclaró que en este sentido "la ley migratoria boliviana dice lo mismo que dice ahora la Argentina". Además, señaló que "el control es parte de las facultades del Estado y no una herramienta fascista".
La situación llegó a un punto de máxima tensión cuando Bullrich debió aclarar que en el gobierno argentino "no barajamos en absoluto la construcción de un muro con Bolivia". En paralelo y antes de viajar hacia Buenos Aires, Gonzales le había contestado que sus declaraciones sobre la causa del aumento del narcotráfico eran "estigmatizantes".
"Viajamos para asegurarnos de que no se cercenen derechos de los ciudadanos bolivianos", le dijo ayer a "Crónica".
Las aguas habían comenzado a calmarse el lunes, cuando la comisión fue recibida por el vicecanciller Pedro Villagra Delgado, con quien, entre otros temas, acordaron una reunión entre los presidentes Evo Morales y Mauricio Macri "casi seguro" para el primer semestre del año.
"Ahora estamos en una especie de compás de espera hasta que se realice la reunión técnica", resumió Gonzales.
Por Florencia Golender