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INTERNACIONALES
10 de junio de 2016
Pedro Pablo Kuczynski logró la mayoría de votos en las elecciones presidenciales del domingo celebradas en Perú, según anunció este jueves la autoridad electoral de Perú (ONPE).
Tras cuatro días de incertidumbre por lo ajustado del resultado y con el 100% de las actas procesadas y el 99,77% del escrutinio, Kuczynski suma el 50,12% de los votos frente al 49,88 de su rival, Keiko Fujimori.
Sólo resta contar los votos de 173 actas, las mismas que han sido remitidas a los respectivos jurados electorales especiales para su pronta resolución.
Son unos 50.000 votos los que aún están en disputa y Kuczynski tiene ahora una ventaja de 41.438.
Keiko Fujimori no concedió aún la derrota.
Keiko Fujimori no concede aún la derrota.
Horas antes, el portavoz del partido de la candidata, Pedro Spadaro, afirmó que "nadie puede cantar victoria" hasta que las autoridades electorales cuenten hasta el último voto y se resuelvan las actas con observaciones.
Mariano Cucho, director de la ONPE, afirmó que la revisión y el resultado definitivo se conocerá "pronto".
Ante el último avance del proceso de la ONPE, Kuczynski habló ante los medios en su casa.
Si bien reconoció que su triunfo aún no es oficial y pidió esperar el resultado final (el conteo del 100% de las actas), habló proyectándose como virtual presidente de Perú.
Pedro Pablo Kuczysnki se considera ya "virtual" vencedor de las elecciones.
"Vamos a trabajar para todos los peruanos. Hay muchos peruanos que sienten que el tren los pasó y queremos que todos se suban al tren", agregó. "Yo me voy a ocupar de estar ahí, de trabajar por todos ustedes para que en el 2021, en el bicentenario (de la independencia), el Perú sea otro".
El anuncio de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) fue criticado por partidarios de Fujimori, que lo consideraron apresurado y señalaron que es el rector Jurado Nacional de Elecciones (JNE) quien debe proclamar oficialmente al nuevo presidente de Perú.
Seguidores del PPK
Tras el anuncio, decenas de simpatizantes del veterano economista de centro-derecha celebraron y vitorearon "¡Sí se pudo!", "¡Sí se pudo!" en una manifestación frente a la sede del partido PPK.
Legisladores del partido de Fujimori dijeron que la ONPE debió haber esperado la resolución de algunas impugnaciones de mesas de votación, luego de que se encontraran irregularidades en un centro de votación en Estados Unidos y en otra zona muy remota del Amazonas.
Si los resultados no varían, no cambian, si los resultados nos son adversos, vamos a reconocerlos", dijo el legislador del partido de Fujimori, Pedro Spadaro.
El experimentado exministro de Economía recibió en la recta final de la campaña el espaldarazo de la mayoría del espectro político peruano, que vio en él la última oportunidad deimpedir la vuelta de un Fujimori al poder.
Keiko es hija del expresidente Alberto Fujimori, que gobernó con mano dura entre 1990 y el 2000 y que en la actualidad cumple una condena por abusos a los derechos humanosycorrupción.
El partido de Fujimori ganó la mayoría absoluta del Congreso en las elecciones de abril, por lo que Kuczynski, si quiere que sus iniciativas sean aprobadas, deberá sentarse a negociar.
A Keiko Fujimori le sigue la herencia de su padre, el expresidente Alberto Fujimori.
"A mis contrincantes les ofrezco mi mejor voluntad para dialogar. No es una división Perú entre sur y norte, entre sierra y costa. Somos un solo país y tenemos que trabajar como un solo país", dijo Kuczynski, exfuncionario del Banco Mundial.
Hijo de inmigrantes europeos con una imagen de funcionario eficiente, Kuczynski apeló durante su campaña a su experiencia, pero también a propuestas como reducir impuestos y ampliar el déficit fiscal.
El objetivo es generar más recursos y acelerarel paso de la economía del país minero, que se ha ralentizado al ritmo de los menores precios mundiales de las materias primas.
Si bien muchos creen que "el gringo" es demasiado mayor para gobernar, es uno de los pocos políticos importantes en Perú que no ha estado envuelto en escándalos de corrupción y eso también parece haber jugado a su favor.