El diplomático precisó que "viajarán 21 militares de esa fuerza, con autorización para participar de las tareas de logística y provisión de equipamiento para la identificación de los cuerpos".

La asistencia humanitaria a cargo de los Cascos Blancos consiste en proveer de voluntarios especialistas en sanidad y primeros socorros contención psicosocial, rescate, agua y saneamiento y manejo de albergue en la ciudad de Manta, uno de los epicentros del desastre por el sismo de 7,8 grados en la escala de Richter.

La Cancillería Argentina envió además carpas, pastillas potabilizadoras, frazadas, remedios de atención básica, kits de higiene y de cocina.

Desde el lunes pasado, esa misión se despliega en el terreno para cooperar con el gobierno ecuatoriano luego de que se declarara el estado de emergencia ante las devastadoras consecuencias del terremoto, informó la Cancillería.

Las misiones de Cascos Blancos colaboran no sólo con la asistencia a los damnificados sino también con el entrenamiento de recursos locales en diferentes temáticas, como el diagnóstico de estructuras dañadas y el manejo de suministros humanitarios, entre otros.

El peor sismo de los últimos 40 años en Ecuador ocurrió el sábado a las 18.58 (20.58, hora en Argentina), en la costa norte del país entre los balnearios costeros de Cojimíes y de Pedernales, en la provincia de Manabí y colindante con la vecina Esmeraldas.

Tras el desastre, el gobierno ecuatoriano declaró el estado de emergencia en las provincias de Esmeraldas, Manabí, Guayas, Santo Domingo de los Tsáchilas, Los Ríos y Santa Elena, así como el estado de excepción en todo el territorio nacional.