Durante la mañana, y atento a que la lluvia impedía la circulación, el IPV avanzó con sus máquinas por encima del puente para volver a abrir el tránsito, que se había cerrado hace una semana cuando la empresa HORMICAT fue intimada a concluir la obra.

Es la segunda vez que el IPV toma la autodeterminación de habilitar el puente de manera transitoria, ya que el cauce del río Ongolí imposibilita la circulación por el badén que se utiliza para llegar al barrio.

Según pudo averiguar El Ancasti, la semana pasada el IPV le pagó uno de los certificados de obra a la empresa, sin embargo el puente todavía está sin terminar. Según las versiones, la contratista retomó los trabajos mínimos en el puente, ya que el IPV hasta ahora solo habría pagado el 40% de la obra, que está casi en un 75% lista.

La diputada opositora Analía Brizuela (FCS) volvió a reiterar su malestar y preocupación por el estado del puente y se preguntó cuándo el Gobierno dará las razones por las cuales la obra aún no está terminada, siendo que falta tan poco para ello. "El tránsito por el puente sin terminar pone en riesgo la salud de los vecinos y los transeúntes del barrio, ya que todavía no tiene las medidas de seguridad necesarias para la circulación", expresó la diputada.

Hace una semana, el IPV había intimado a la empresa a retomar la obra bajo amenaza de anular el contrato. En ese momento, las autoridades del organismo provincial señalaron que la obra estaría lista para los primeros días de febrero.

El puente de la Ciudad Satélite fue prometido en cuatro oportunidades desde el momento de su licitación y adjudicación en 2014, y la obra debió estar lista en octubre del año pasado.